Santa Coloma de Gramenet ya ha puesto en marcha la primera fase para convertir el río Besòs en el BesArt, el museo al aire libre de arte urbano más grande del mundo, según han señalado los promotores del proyecto. La idea inicial es que abarque un total de ocho quilómetros de espacio, aunque el objetivo de sus impulsores es que el museo acabe ocupando hasta 18 quilómetros. El BesArt se configura como un museo sin barreras ni tiques, y con un comisariado que garantizará la calidad de las obras presentes.
LISTO EN PRIMAVERA
Las paredes que delimitan el caudal del río en el término municipal de Santa Coloma acogerán obras de artistas de renombre internacional en el lecho izquierdo, que podría empezar a contar con los primeros autores a partir de la primavera. Por otro lado, el flanco derecho estará a disposición de artistas locales, de escuelas e incluso de familias, un espacio bautizado como El Refugio. En total están disponibles cinco millones de metros cuadrados de superficie. "Es el espacio más grande del mundo y ahora debemos llenarlo", ha explicado el presidente de la asociación Mediterranean Street Art, David Hernández.
Presentación del BesArt en Santa Coloma de Gramenet / AJ SANTA COLOMA DE GRAMENET
PUENTE ENTRE CATALUNYA Y EL MUNDO
La presentación se ha llevado a cabo este miércoles en el Parc Fluvial del Besòs, con la alcaldesa de Santa Coloma, Núria Parlón, el presidente de la Asociación Mediterranean Street Art e ideólogo del proyecto, David Hernández, y el presidente del Real Círculo Artístico de Barcelona, Josep Fèlix Bentz, entre otros. La alcaldesa del municipio ha explicado que el BesArt es un proyecto "transformador en el ámbito metropolitano y catalán", a la vez que ha reivindicado la periferia metropolitana, así como los valores culturales, artísticos y de respeto del proyecto.
Por su parte, Hernández, nacido en Santa Coloma, ha explicado que el BesArt es un museo de arte urbano al aire libre, abierto al mundo y transversal "que establece un puente entre Catalunya y el mundo". Josep Fèlix Bentz ha asegurado que este espacio espera convertirse en "un punto de destino" para los visitantes que vayan a Barcelona, equiparable a otros espacios como la Sagrada Familia.