Este domingo en Barcelona saltaron todas las alarmas: una pitón de la India de 15 kilos de peso apareció enroscada a un árbol del distrito de Les Corts. Dos días después, un nuevo animal exótico decide hospedarse en el centro de la capital catalana.
Se trata de los murciélagos, una especie animal que se adentra en la ciudad durante estos meses de verano.
LIMPIAR LA CIUDAD
En 2018 el Ayuntamiento de Barcelona colocó en la ciudad la primera caja para murciélagos en el Eixample. Ahora, hay 18 en toda la capital catalana. Se trata de unas cajas de madera bien ventiladas que cuentan con capacidad para hasta 200 individuos. Su función, aunque parezca menor, consiste en limpiar Barcelona de las plagas de insectos.
El gestor de la biodiversidad urbana de Barcelona, Octavi Borruel, explica que está científicamente acreditado que medio millar de murciélagos ingieren entre 15 y 30 toneladas de insectos cada año. Unas cifras sorprendentes: equivale a un tercio de su peso en bichos, sobre todo, mosquitos.