La AEMET ya ha alertado de que en los próximos días habrá una jornada de calor extremo. Teniendo en cuenta esta circunstancia, son muchos los barceloneses que se desplazan a los pueblos costeros del litoral catalán para refugiarse de las temperaturas.
La Costa Brava es una de las zonas más demandadas, ya que ofrece calas de agua cristalina a poco más de una hora en coche desde Barcelona. Pero no todo el mundo tiene transporte privado. Es por este motivo que muchas personas optan por desplazarse en tren.
CÓMO LLEGAR A LA COSTA BRAVA
Los pueblos de la Costa Brava mejor conectados con la capital catalana son, sin lugar a dudas, Lloret de Mar y Tossa de Mar. La opción más económica para a ir a estos dos pueblos pesqueros es coger la R1 de Rodalies y bajar en Blanes.
Imagen de una estación de Rodalies / EUROPA PRESS
Una vez en Blanes, hay unos buses que tienen parada en Lloret de Mar y Tossa de Mar. Los autobuses están coordinados con Renfe, de tal manera que los pasajeros no tendrán que esperar mucho rato para poder llegar a sus destinos.
PRECIOS DE LOS BILLETES
Rodalies cuenta con los descuentos de los abonos y el precio del billete de autobús ronda los tres euros. Dependiendo de si el lugar de destino es Lloret o Tossa, variará unos céntimos.