La jornada del domingo estará marcada por un tiempo inestable y un ligero descenso de las temperaturas en el noroeste del país, pero Barcelona vivirá lo contrario: en la capital catalana se superarán los 30 grados, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). También Girona experimentará esta subida repentina de las temperaturas.

Un cambio que llega a Barcelona tras la tormenta que se vivió la tarde de este viernes, 15 de septiembre, que dejó grandes y voluminosas precipitaciones en la ciudad y su área metropolitana.

POR LO DEMÁS, INESTABLE

Sin embargo, ambas provincias serán la excepción. En el resto del país se esperan mínimas por debajo de los 20 grados. En concreto, debido a un sistema atlántico de bajas presiones, es previsible que continúe el tiempo inestable en buena parte de la Península, con un frente frío atravesando el noroeste.

El panorama para el resto de la semana se prevé, por otra parte, nublado y cubierto en su mayoría, pero las temperaturas se mantendrán altas.

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