El mundo gastronómico de Barcelona es un vibrante mosaico de sabores que refleja la rica cultura catalana y su posición en la vanguardia culinaria. La ciudad es famosa por sus tapas, un reclamo turístico tan icónico como los monumentos de la ciudad. Esos pequeños bocados juntan lo mejor de la gastronomía española y se sirven en pequeñas y económicas porciones. La cocina catalana destaca, además, por el uso de ingredientes frescos y de temporada que se pueden obtener en numerosos mercados ubicados por la ciudad, como La Boqueria.
Pero la capital catalana no solo es un lugar de excelsa tradición, sino también una gran sede del vanguardismo gastronómico mundial. Por eso mismo, no es de extrañar que cuente con un total de 35 estrellas que pertenecen a 24 establecimientos, lo que la sitúa como la ciudad española con más reconocimientos de este tipo. No solo eso, sino que la propia guía gastronómica reconoce también 70 locales con otras distinciones, como los recomendados y las estrellas verdes.
PROPUESTAS ECONÓMICAS
De hecho, durante la presentación de la Gala Michelin de este año, el menú que se servirá estará diseñado y coordinado por tres de los más grandes chefs triestrellados, es el caso de Jordi Cruz (Restaurante ABac), los hermanos Javier y Sergio Torres (Cocina Hermanos Torres) y Pablo Casagrande (Lasarte).
Interior del ABaC, uno de los causantes de que Barcelona se haya convertido en un destino gastronómico / ABAC
Aunque los restaurantes estrellados no suelen estar al alcance de cualquier bolsillo, hay algunos que sí tienen precios económicos para la calidad de su producto. Es el caso de Hisop, un restaurante de Sarrià - Sant Gervasi con más de 20 años de historia y cuyo menú diario cuesta 38 euros. Los locales COME y Mont Bar tienen este galardón y precios inferiores a los 50 euros, entre otros.
Otros, además, están vinculados a algunos de los grandes hoteles de la urbe, como el Aürt. El local, dirigido por el reconocido chef de Terrassa Artur Martínez y que está ubicado en el hotel Hilton Diagonal.