La 'meca' del espiritismo en Barcelona, un castillo en ruinas, sucio y degradado

Hay rincones a los que la gente acude en fechas señaladas como Halloween para descubrir si realmente existe lo paranormal. Lejos de las reuniones casi clandestinas de estilo victoriano, lo habitual hoy en día es buscar lugares abandonados --o no-- sobre los que pesan leyendas de este tipo. Barcelona, en este sentido, tiene una particular 'meca' del espiritismo que presenta un estado muy degradado.

Se trata de la Torre Salvana, una fortificación que data del siglo X y que, a pesar de ser un reclamo habitual para aficionados al misterio y un punto histórico de referencia, presenta un estado muy degradado. Numerosos grafitis decoran los escombros de estas ruinas históricas, mientras que el suelo está lleno de cristales, botellas y latas. Ello, sin embargo, no corta con el halo casi arcano que pesa sobre el lugar.

ACTIVIDAD PARANORMAL

Y es que son muchos los testimonios que aseguran haber vivido 'encuentros' que trascienden lo racional, lo que lo ha convertido en un punto de referencia para hacer psicofonías. Otros, sin embargo, aseguran haber visto a una niña correteando por las estancias e incluso haber notado como les agarraban de los brazos y piernas.

Metrópoli se ha desplazado hasta el lugar para explorar el sitio de primera mano y, puede que producto de la sugestión, es testigo de cómo cambia la atmósfera una vez se cruzan las destartaladas puertas.

RECORRIDO

Tras unos minutos de travesía por bosque desde los aparcamientos más cercanos, se alzan estas ruinas históricas sobre un descampado, cada vez más pequeño por el inexorable paso del tiempo y la naturaleza, que se abre paso poco a poco a pesar de vallas y murallas.

Tras cruzar la puerta principal, se intensifica el olor a algarrobo silvestre y el silencio ensordecedor solo se ve interrumpido por el paso de algún que otro coche por carreteras cercanas o de un tren por las vías aledañas. 

La Torre Salvana, en Santa Coloma de Cervelló Luis Miguel Añón

Recorrer el interior, con sus habitaciones y pasillos, es un viaje al pasado que levanta incógnitas a la vez que, por qué no admitirlo, indignación a todo aquel aficionado a la historia. Las estancias interiores, pozos de oscuridad que permanecen ajenos a la luz de focos y linternas, ocultan restos de degradación que otros dejaron, desde colchones hasta latas, cristales o piezas metálicas oxidadas.

ABANDONADO

Hubo un tiempo en que esta fortificación de estilo románico con elementos neogóticos introducidos a posteriori acogió a familias de la nobleza catalana. De ellas, tan solo queda un eco que resuena en las antiguas estancias vacías. En algún momento de los últimos años, hubo un intento de rehabilitación. De él, solo queda un vallado con planchas metálicas que recubre parte de la muralla exterior.

La Torre Salvana, en Santa Coloma de Cervelló Luis Miguel Añón

Uno no puede dejar de preguntarse cómo este rincón, ubicado en la localidad metropolitana de Santa Coloma de Cervelló, permanece con el pasar de los años en un estado tan deplorable, pues de los más de mil años que tiene el lugar solo quedan muros y escombros pintados por vándalos.

La Torre Salvana continuará en su montículo, vigilando el cauce del río Llobregat, a la espera de ser reformada para convertirse en un atractivo turístico del municipio, o de que jóvenes en busca de experiencias fuertes se adentren en su interior para explorar sus rincones bajo la atenta mirada de su torreón, la luna, y quién sabe si algo --o alguien-- más.