A poca distancia de Barcelona se encuentra uno de los pueblos más hermosos de España, una villa que podría aparecer en una película de Disney por su increíble encanto, que invita a soñar.
El municipio, de sólo 285 habitantes, está situado entre los riscos de Aiats y la Garrotxa, a 845 metros de altitud y en el centro de Collsacabra, una zona a caballo entre las comarcas de Osona, Garrotxa y la Selva. Se trata de Rupit i Pruit.
El pueblo de Rupit de la provincia de Barcelona en una imagen de archivo
RUPIT I PRUIT
La silueta del pueblo es famosa por el campanario de la iglesia de Sant Miquel, de origen medieval y uno de los principales atrayentes de turistas. Rupit mantiene su pasado barroco, que lo convierte en un pueblo con encanto: calles empedradas, casas rústicas de los siglos XVI y XVII y su peculiar puente colgante de madera.
El pueblo está rodeado por la riera de Rupit, bosques frondosos, rutas, tumbas prehistóricas y saltos de agua donde se respira el silencio y la calma de la naturaleza. A pocos kilómetros de Rupit, a una altitud de 950 metros, se encuentra Pruit, donde la iglesia de Sant Andreu preside un pequeño núcleo de casas, algunas de ellas de gran belleza.
A pocos kilómetros de la localidad, se encuentra el salto de agua de Sallent, que es un destino perfecto para los amantes de la naturaleza que quieren desconectar de Barcelona.
El pueblo de Rupit / GETTY IMAGES
¿CÓMO LLEGAR?
Para llegar en coche a Rupit i Pruït desde Barcelona hay que coger la C-17 hasta Vic y, una vez ahí, seguir las indicaciones hasta el pueblo. Se trata de un trayecto que dura, aproximadamente, una hora y media.
Para ir en transporte público, hay la línea R3 de Rodalies hasta la capital de Osona. Una vez ahí, hay autobuses hasta el municipio. No obstante, cabe recordar que el trayecto es de entre dos y tres horas en función de los horarios.