La tecnología PSI (siglas en inglés de instrumento personalizado específico) aplicada en las intervenciones de prótesis de tobillo es una innovadora técnica que permite un estudio previo exhaustivo de la intervención, así como la creación de prótesis a medida del paciente. Todo ello se traduce en una operación más precisa, segura y con mejores resultados. Se trata de un avance significativo en la cirugía de tobillo y abre el camino a la implantación de la cirugía robótica en este ámbito.
Esta tecnología, practicada por primera vez en España por el Hospital Quirónsalud de Barcelona, está especialmente indicada en pacientes con enfermedades degenerativas, traumatismos graves o condiciones crónicas que afectan a la articulación del tobillo y también para aquellas personas que experimentan dolor crónico, rigidez articular severa o pérdida de la funcionalidad del tobillo. “No se debe indicar en casos leves, sino sólo en aquellos donde no hay otra solución”, apuntan desde el centro.
¿CÓMO SE APLICA?
La tecnología PSI se aplica a partir de un estudio previo exhaustivo que incluye la creación de una representación tridimensional del pie y el tobillo del paciente. Esto permite al cirujano, apoyado en un equipo de ingenieros, diseñar la colocación exacta de la prótesis y el tamaño más adecuado para que se adapte a cada paciente. Con estos datos, se crean unas guías en 3D que permitirán, el día de la cirugía, colocar la prótesis deseada en el lugar planificado previamente.
Este tipo de tecnología ya se había utilizado previamente en intervenciones de rodilla, y los éxitos logrados en esta cirugía han servido para que finalmente se haya planteado ampliar sus indicaciones también a las cirugías de tobillo. En el tobillo existen algunos modelos de PSI, pero los avances en bioingeniería han permitido la modelización exacta del tobillo, permitiendo la aplicación de esta tecnología.
ASÍ LO EXPLICAN LOS EXPERTOS
“Con la tecnología PSI podemos planificar y llevar a cabo la intervención de una manera más eficiente, adaptando la prótesis a la anatomía de cada paciente, y pudiendo definir previamente junto con un equipo de ingenieros dónde cortar exactamente en el hueso para lograr una inserción de la prótesis lo más perfecta posible”, apunta el director de Institut Rabat y jefe del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología de Pie y Tobillo del Hospital Quirónsalud Barcelona Eduard Rabat que, junto al responsable de la cirugía de retropié Josep Torrent, ha sido el responsable de las primeras intervenciones.
La articulación del tobillo es muy compleja y es muy difícil de sustituir. Aún así, gracias a los avances en los últimos años se ha podido adaptar esta tecnología PSI que ya se utilizaba en las prótesis de rodilla. “Al estar diseñada a medida, la prótesis de tobillo personalizada permite una adaptación precisa y una mayor estabilidad en comparación con las prótesis estándar. Eso se traduce en una mejoría significativa en la movilidad y en poder ofrecer una cirugía más precisa y segura”, señala el doctor Torrent.
CARACTERÍSTICAS
La prótesis de tobillo personalizada, conocida como Quantum Total Ankle System, presenta una serie de características sobresalientes que la hacen destacar entre otras opciones de prótesis. Algunas de las principales características de esta prótesis son:
Diseño personalizado: previamente a la cirugía, se diseña la prótesis y se adapta a la anatomía única de cada paciente, lo que garantiza una mayor precisión y un ajuste óptimo.
Guías de corte 3D: mediante el uso de tecnología de modelado en tres dimensiones, se generan guías de corte altamente precisas, lo que facilita al cirujano seguir una planificación preoperatoria precisa durante la intervención.
Máxima funcionalidad: este sistema proporciona una amplia gama de movimiento y una funcionalidad similar a la del tobillo natural. Esto permite a los pacientes recuperar la movilidad y realizar actividades cotidianas con mayor comodidad y confianza.
BENEFICIOS DE LA PRÓTESIS PERSONALIZADA
Alivio del dolor: reemplaza la articulación dañada, alivia el dolor y mejora la calidad de vida del paciente.
Restauración de la movilidad: los pacientes pueden recuperar una parte de la movilidad perdida y llevar una vida más activa y funcional.