El cáncer de pulmón se puede curar. La clave está en descubrirlo a tiempo y en tener un diagnóstico lo antes posible. Se trata del cáncer que más muertes causa en el mundo, y sólo el 20% de los casos se detectan en fases iniciales, cuando las probabilidades de supervivencia son elevadas. Uno de los motivos de su elevada mortandad es que el diagnóstico se realiza de forma muy tardía, como demuestra el hecho de que en el 80% de los casos se detecta cuando el cáncer ya se ha extendido a otras partes del cuerpo.
El hecho de que en estadios iniciales esta enfermedad no muestre síntomas más allá de cansancio, malestar general o pérdida de apetito y peso, es lo que dificulta ser detectado a tiempo. Esta es la razón principal por la que los oncólogos destacan la importancia de un diagnóstico precoz que permita detectar estos tumores cuando aún existen posibilidades de ser tratados con éxito.
REDUCIR LA MORTALIDAD
La principal causa del cáncer de pulmón es el tabaquismo, responsable del 90% de casos de la población general y de que su incidencia en mujeres se haya triplicado en la última década. La principal estrategia para reducir la mortalidad por este motivo es, lógicamente, reducir el consumo de tabaco.
El cribado para el cáncer de pulmón ha demostrado ser una herramienta útil en la reducción de mortalidad por cáncer de pulmón. Por ello, los expertos abogan por introducir programas similares a los aplicados con éxito en la detección precoz de los tumores de mama, cuello de útero o colon.
EL PROYECTO CASSANDRA
En España está en marcha el proyecto Cassandra, un programa piloto de cribado liderado por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) que pretende analizar su viabilidad. En el mismo están implicados 42 hospitales de 16 comunidades autónomas y se contempla, por supuesto, la deshabituación tabáquica de las personas que participen en el mismo.
La prueba para los tumores de pulmón consiste en la realización de un TAC de baja radiación y sin contraste a pacientes con alto riesgo de desarrollar una neoplasia pulmonar. Esto es, fumadores y exfumadores de entre 50 y 75 años que consumen al menos un paquete de tabaco al día durante 20 años y aquellos que han dejado de fumar durante los 15 años anteriores.
LOS BENEFICIOS DEL CRIBADO
"El cribado de cáncer de pulmón ha conseguido diagnosticar el 80% de los tumores en estadios precoces y reducir así la mortalidad entre un 20% y un 55%”, explica el doctor Laureano Molins, cirujano torácico de Hospital Quirónsalud Barcelona y Consultor del Servicio de Cirugía Torácica del Hospital Clínic.
El especialista señala que “no se había observado nunca una supervivencia del 80% en pacientes diagnosticados de cáncer de pulmón…En diferentes países europeos como Polonia, Croacia, República Checa, Reino Unido e Italia, la administración ya contempla dichos cribados con financiación específica y la Comisión Europea insiste en la importancia del diagnóstico precoz del tumor con mayor mortalidad a nivel mundial".
EL CÁNCER DE PULMÓN EN LA MUJER
Estos programas de cribado de cáncer de pulmón permiten también diagnosticar otras patologías, como problemas cardíacos o pulmonares y osteoporosis, lo que permite derivarlos a los especialistas adecuados e iniciar de forma precoz tratamiento sobre estos hallazgos. Eso contribuye a reducir la mortalidad global en un 10%.
La mortalidad por cáncer de pulmón en la mujer ha igualado ya al cáncer de mama a nivel global. Algunos estudios sugieren que, a una misma exposición de tabaco, las mujeres tienen un riesgo mayor de desarrollar una neoplasia pulmonar y que el beneficio obtenido con el cribado es aún mayor que en los hombres.
CIRUGÍA Y RADIOTERAPIA
Las principales estrategias para la curación de estos tumores son la cirugía y la radioterapia. La estrategia quirúrgica incluye la extirpación del tumor de forma mínimamente invasiva, consiguiendo una alta tasa de curación por encima del 90% en tumores estadios iniciales.
Hay pacientes que por edad o enfermedades graves asociadas no podrán beneficiarse de una cirugía curativa. Para este perfil de pacientes existe una técnica de tratamiento con Radioterapia que ofrece unas tasas de curación similares a la cirugía. Esta técnica se llama Radiocirugía Pulmonar o SBRT (Stereotactic Body Radiotherapy) y permite tratar estos tumores con radiación ionizante.
Con un máximo de ocho sesiones de radioterapia, el paciente puede someterse a este tratamiento de forma ambulatoria, mientras hace vida completamente normal. Cada sesión de tratamiento dura 15 minutos y con apenas efectos secundarios. “En Hospital QuirónSalud Barcelona realizamos esta técnica desde hace 15 años y más de 200 pacientes se han podido beneficiar de este tratamiento" señala el doctor Enrique Puertas Calvo, jefe de Servicio Oncología Radioterápica, quien recuerda que esta técnica aporta “la máxima precisión y protege además los tejidos sanos que rodean al tumor”.