Estos serán los dos últimos conciertos en la sala Sidecar de Barcelona: fechas y detalles

La Sala Sidecar vivirá un último baile antes de cerrar. Los días 30 y 31 de enero, el emblemático espacio musical de la plaza Reial dirá adiós a casi medio siglo de canciones e himnos, después de que su propietario, Roberto Tierz, decidiera traspasar el local.

Los dos conciertos quieren simbolizar el fin de una etapa con la actuación de artistas y amigos de la sala, que tras 6.000 conciertos, quieren rendirle homenaje.

ÚLTIMOS CONCIERTOS

Ambas representaciones musicales, tanto la del 30 de enero como la del 31, tendrán un precio de 20 euros. El primero estará protagonizado por la actuación del grupo barcelonés Azucarillo Kings, que también contará con una sesión de karaoke especial comandada por Ladilla Rusa.

El segundo concierto, programado para el 31, comenzará con una fiesta dedicada al rock encabezada por los Rebeldes 79. Tras ellos, será el turno de Josele Santiago, vocalista de Los Enemigos, y de un grupo sorpresa, cuyo nombre se desvelará en directo.

NUEVA ETAPA

Tras este último baile, la sala abrirá una nueva etapa de la mano de un gran grupo de coctelería que, en los últimos años, se ha hecho con el control del Born.  Según el acuerdo de traspaso, los nuevos propietarios fusionarán el mundo de la mixología con los conciertos que definen a la sala de la plaza Reial para "garantizar el legado de Tierz".

Los nuevos administradores ya explotan el bar Sauvage, una coctelería de la zona. El negocio pertenece a Albert Taberner Puigdelloses y a Juan Felipe Bourdillon Torras, más conocido como Juan Falcón Tornu en el mundo de la coctelería. Este individuo también está vinculado a Creps al Born, una destacada coctelería del centro de Barcelona, y a muchos otros negocios similares de la zona.

CÓCTELES Y MÚSICA

Según ha explicado el director de la sala a este digital, el proyecto de los nuevos propietarios es que la planta de arriba de la sala sea una coctelería y la sala de abajo una sala de conciertos. Cuando se efectúe el traspaso, los nuevos propietarios cerrarán el espacio durante unos dos meses para "reformarlo y crear una nueva imagen".