Jaume Collboni en el acto de presentación de 'En agosto nos vemos', en la Biblioteca García Márquez

Jaume Collboni en el acto de presentación de 'En agosto nos vemos', en la Biblioteca García Márquez

Vivir en Barcelona

Collboni ofrece Barcelona para un nuevo boom latinoamericano al lado del hijo de García Márquez

El alcalde recuerda al escritor en la presentación de su última obra, 'En agosto nos vemos¡, desde la Biblioteca Gabriel García Márquez

6 marzo, 2024 19:43

Un lleno de excepción. La Biblioteca Gabriel García Márquez, en la calle Treball, en la Verneda, ha acogido la presentación mundial de la última obra del escritor colombiano, En agosto nos vemos, con la lectura de fragmentos de sus libros y con la presencia de su hijo, Gonzalo García Barcha. Con muchos escritores entre el público, como Javier Cercas, Núria Amat, y editores y críticos literarios, como Juan Cruz, el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha ofrecido la ciudad para un nuevo boom latinoamericano, recordando la presencia de ‘Gabo’ en la capital catalana entre 1967 y 1975. En Barcelona, García Márquez escribió El otoño del patriarca, y siempre fue su ciudad de referencia, en complicidad con su editora, Carme Balcells. "Vamos a por otro boom literario desde Barcelona", ha señalado, justo el día en el que 'Gabo' habría cumplido años.

Collboni, que ha llegado tarde al acto, cuando el auditorio de la Biblioteca García Márquez ya estaba lleno por completo, ha apostado por potenciar la ciudad como la gran capital de la edición en lengua castellana, con un evento de vital importancia en el horizonte, y que Barcelona será la ciudad invitada en la Feria del Libro de Guadalajara, en México, en 2025. “Pondremos todos nuestros esfuerzos en ese acontecimiento, para seguir siendo la capital de la edición”, ha señalado, con la idea, también, de que las editoriales apuesten por “escritoras”, justo en vísperas del Día Internacional de la Mujer.

Gonzalo García Barcha, en el centro, en el acto en la Biblioteca García Márquez

Gonzalo García Barcha, en el centro, en el acto en la Biblioteca García Márquez

El acto, con actuaciones musicales y la lectura de fragmentos de obras de ‘Gabo’, a cargo de escritores y de admiradores, como Joaquín Sabina –en un vídeo difundido a través de una gran pantalla—ha servido para presentar ‘En agosto nos vemos’, un libro que el escritor había comenzado a idear poco antes de que se intensificara su enfermedad. Su familia, y su hijo especialmente, decidió publicarlo, aunque el escritor había señalado que era mejor “destruirlo”. Él no lo hizo en vida, y ahora el libro se publica en la división de literatura de Random House. Su editora, Núria Cabuti, ha destacado la oportunidad de hacerlo “desde Barcelona, desde la Biblioteca García Márquez –que ha ganado diversos premisos por su particular arquitectura—y para todo el mundo”. También ha destacado la calidad de la obra Pilar Reyes, directora editorial de la Divisón Literaria de Penguin Random House.

Esa proyección de la ciudad debe servir en los próximos años, según Jaume Collboni, para potenciar el sector editorial, con más autores y autoras, con una apuesta clara por la literatura en castellano, en un momento en el que la otra gran ciudad del mundo que edita en español, México, podría atrapar a la capital catalana.

¿El 'perdón' de 'Gabo' a sus hijos?

El hijo de García Márquez ha explicado que en 2022, con algunas apreciaciones de gente cercana a 'Gabo', se decidió contactar con los "compinches" de la agencia literaria de Carme Balcells y ver una posible publicación. "El final de la obra, no la veíamos, pero hay un final muy emotivo, que no voy a explicar para todos aquellos que la están leyendo, aunque me recuerda al cine en blanco y negro mexicano". García Barcha ha incidido en que había varias versiones, y correciones finales. "Había material suficiente para que el editor apostara por un final original", ha señalado. El resultado de todo ello es En agosto nos vemos

Gonzalo y Rodrigo, los dos hijos de 'Gabo', esperan que su padre les perdone por la publicación, pese a que el escritor había afirmado que era mejor "destruir" ese material, la última obra en la que estaba trabajando cuando se exproximaba el final de su vida.