Se cumplen 100 años del peor accidente en el metro de Barcelona
En la tragedia murieron 11 trabajadores, que quedaron sepultados en las vías
13 abril, 2024 10:37Se cumplen 100 años de la peor tragedia en el metro de Barcelona. El 12 de abril de 1924, 11 trabajadores murieron durante la construcción de una línea del suburbano, en un punto de la Gran Via de les Corts Catalanes, entre Villarroel y Casanova. En ese día se derrumbó un tramo del túnel que se estaba construyendo entre La Bordeta y plaza Catalunya.
Los hechos tuvieron lugar durante la madrugada. Más de 30 obreros de entre 16 y 40 años se encontraban trabajando en las vías del metro, justo en la excavación del túnel de la Gran Via a la altura de la calle Villarroel. Sin embargo, no se esperaban que ese mismo día, los muros laterales de la bóveda bajo la que excavaban cederían, provocando un gran derrumbe y dejando atrapados a una parte de los empleados.
Un gran agujero en la calle
Rápidamente, las autoridades se trasladaron al lugar del accidente. Allí se encontraron un gran agujero de cerca de 50 metros. El socavón también había afectado a las vías del tranvía, obligando a detener el servicio. Las labores de rescate fueron complicadas, ya que debía garantizarse la seguridad tanto del servicio de emergencias como de los posibles supervivientes.
Las causas, todavía inciertas
Aunque las causas del accidente generaron mucha polémica, los medios de comunicación informaron que las autoridades reforzaron la versión de que todo aquello se debía a la "imperícia" de los trabajadores por un "defecto de construcción".
Días más tarde, La Vanguardia publicó que el informe encargado a dos arquitectos no apuntaba "culpa ni imprudencia por parte de ninguna persona determinada", pero sí atribuía el accidente a tres factores: la mala calidad del terreno, la proximidad de una cloaca abandonada que no se había tenido en cuenta para realizar el proyecto y una "defectuosa estibación atribuible a la mano de obra".
El 12 de abril de 1924 quedó grabado en la memoria de muchos. Sin embargo, poco a poco este recuerdo se ha ido borrando y son pocos los que todavía recuerdan el accidente, una de las peores tragedias en el metro de Barcelona.