El puente de Nelson Mandela en una imagen de archivo

El puente de Nelson Mandela en una imagen de archivo AYUNTAMIENTO DEL PRAT DE LLOBREGAT

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El espectacular puente a 20 minutos de Barcelona: mirador de aviones y vistas panorámicas

Esta estructura de El Prat de Llobregat es una obra maestra de la ingeniería y el diseño arquitectónico

19 abril, 2024 13:44

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Hay un puente único en Catalunya que está a menos de media hora de Barcelona. En concreto, se encuentra en El Prat de Llobregat y está situado a más de 36 metros de altura. Desde allí, las vistas del Parc Natural del Delta de Llobregat son impresionantes. 

Se trata del puente de Nelson Mandela, que tiene el arco más grande de toda la comunidad autónoma. Esta impresionante estructura no solo enlaza dos puntos importantes del área metropolitana de Barcelona, sino que también rinde homenaje al legado de uno de los más grandes líderes del siglo XX, Nelson Mandela. Desde su inauguración en 2015, el puente ha capturado la atención de los vecinos y turistas, aunque muchos no lo conocen. 

Vistas panorámicas desde el puente de Nelson Mandela

El entorno natural que rodea el puente Nelson Mandela es espectacular, con vistas panorámicas que abarcan desde las montañas hasta el mar Mediterráneo. Los senderos peatonales a lo largo del puente invitan a los transeúntes a disfrutar de paseos relajantes mientras absorben la serenidad del paisaje. Además, la cercanía al Aeropuerto de Barcelona-El Prat agrega un toque dinámico al entorno, con aviones despegando y aterrizando regularmente que se pueden ver desde el puente.

El puente de Nelson Mandela en una imagen de archivo

El puente de Nelson Mandela en una imagen de archivo AYUNTAMIENTO DEL PRAT DE LLOBREGAT

El puente de Nelson Mandela es una obra maestra de la ingeniería y el diseño arquitectónico. Su estructura moderna y elegante se eleva sobre el río Llobregat, con un diseño que combina líneas curvas y rectas. La elegancia de su diseño se complementa con detalles funcionales, como sus amplios carriles para peatones y ciclistas, lo que lo convierte en un lugar popular tanto para aquellos que buscan un paseo tranquilo como para los amantes del ciclismo.

La obra, que tuvo un coste de 28 millones de euros, quedó finalista en la categoría Infraestructuras y urbanismo del Premio Obras CEMEX 11