Ni Disney ni Gaudí: el monumento modernista más espectacular está fuera de Cataluña y es de un arquitecto desconocido
Este santuario no solo es un testimonio de la riqueza del patrimonio cultural de España, sino también un recordatorio de que el talento y la belleza pueden encontrarse en los lugares más inesperados
Cuando pensamos en arquitectura modernista, inmediatamente vienen a la mente las obras de Antoni Gaudí en Barcelona, como la Sagrada Família o el Park Güell. Sin embargo, hay una joya modernista que se alza majestuosa fuera de Catalunya, en la localidad de Novelda, en la provincia de Alicante. Se trata del Santuario de Santa María Magdalena, una impresionante edificación diseñada por el arquitecto José Sala, quien impregnó su proyecto del estilo modernista catalán con una personalidad propia que lo distingue y lo hace único.
La construcción del santuario comenzó en 1918 y se desarrolló en tres fases, concluyendo en 1946. Este proceso de casi tres décadas permitió a Sala perfeccionar su visión y crear un monumento que no solo es un lugar de devoción, sino también una obra de arte que fusiona diversos estilos y materiales de manera armoniosa.
Una iglesia única en Alicante
La fachada principal del santuario es uno de sus elementos más llamativos. Dos torres laterales de 25 metros de altura se alzan imponentes, culminadas por una cruz pétrea que también se encuentra en la cúpula y sobre los arcos superiores de la fachada. Estas torres, con su diseño robusto y detallado, evocan una sensación de fortaleza y espiritualidad que invita a los visitantes a explorar el interior del edificio.
El Santuario de Santa María Magdalena
AYUNTAMIENTO DE NOVELDA
Los motivos decorativos del santuario son una amalgama de influencias medievales, barrocas y de la propia naturaleza. Sala se inspiró en estos estilos para crear una decoración rica y variada que utiliza materiales locales y tradicionales. Entre los materiales empleados destacan los guijarros del río Vinalopó, azulejos policromados, ladrillos rojizos y mampostería, que juntos crean un mosaico de texturas y colores que embellecen todo el exterior del edificio.
La otra Sagrada Família
El interior del santuario es igualmente impresionante. La nave central, de forma rectangular, está flanqueada por dos espacios laterales adosados, configurando una base que recuerda a un vaso de ungüento, el recipiente con el que, según la tradición cristiana, María Magdalena ungió los pies de Jesucristo. Esta original disposición no solo tiene un significado simbólico, sino que también contribuye a la singularidad arquitectónica del edificio.
Al fondo de la nave, en el ábside, se encuentra el camarín de Santa María Magdalena, copatrona de Novelda. Este espacio sagrado es el corazón del santuario y está cuidadosamente diseñado para ofrecer un ambiente de recogimiento y veneración. Detrás del altar, los visitantes pueden admirar un hermoso cuadro atribuido al artista Gastón Castelló, que añade un toque de belleza artística al entorno espiritual del santuario.