Imagen de la localidad de Sant Jaume de Frontanyà / CG

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Vivir en Barcelona

Este es el pueblecito con menos habitantes de Catalunya: está en Barcelona

Con una población de 29 habitantes y una extensión de 21,3 kilómetros cuadrados, este municipio destaca por su tranquilidad y su entorno natural

4 septiembre, 2024 21:19

El pueblecito con menos habitantes de Catalunya se encuentra en Barcelona. Se trata de Sant Jaume de Frontanyà, situado en la comarca del Berguedà. Con una población de 29 habitantes y una extensión de 21,3 kilómetros cuadrados, este municipio destaca por su tranquilidad y su entorno natural, regado por los afluentes de la riera de Merlès. 

Patrimonio arquitectónico

A pesar de su diminuto tamaño, Sant Jaume de Frontanyà cuenta con una rica historia y un patrimonio arquitectónico que refleja su pasado medieval.

El núcleo urbano está organizado en torno a dos calles: la calle de Baix, que es una extensión de la carretera local BV-4656, y la calle de Dalt, que se conecta con el sendero del GR 4-1, una popular ruta de senderismo.

Estas dos vías principales convergen en el punto central del pueblo, donde se ubican la iglesia, el cementerio, la plaza del Ayuntamiento y la plaza de la Iglesia.

Sant Jaume de Frontanyà

Sant Jaume de Frontanyà Fem Turisme

Senderismo y la naturaleza 

Sant Jaume de Frontanya ofrece diversas actividades para los visitantes. Los entusiastas del senderismo y la naturaleza encontrarán en los alrededores del pueblo rutas bien señalizadas, que permite explorar los paisajes montañosos y boscosos de la comarca.

Asimismo, la iglesia románica de Sant Jaume, construida en el siglo XI, es una parada obligada para quienes aprecian el arte y la arquitectura medieval.

¿Cómo llegar desde Barcelona?

Llegar a Sant Jaume de Frontanya es sencillo para quienes buscan una escapada rural. A unos 130 kilómetros de Barcelona, el viaje permite disfrutar de impresionantes vistas a medida que sube a través de las montañas del Berguedà.

Aunque el transporte público es limitado, ésta es precisamente una de las razones que contribuyen a la tranquilidad del pueblo, haciendo de cada visita una experiencia única de paz y desconexión.