Volta de la Perdiu

Volta de la Perdiu Inma Santos

Vivir en Barcelona

El edificio histórico del centro de Barcelona que esconde un callejón en su interior

Entre el santuario de la Virgen de la Ayuda y la Casa Josep Gros hay una puerta de hierro forjado con un pequeño jardín improvisado

6 septiembre, 2024 11:42

Barcelona es una ciudad que esconde secretos en sus calles. Paseando por sus estrechas y sinuosas callejuelas del centro se pueden encontrar tesoros realmente bonitos, como es el caso de la calle Sant Pere Més Baix, entre los números 18 y 22-24.

En esta calle se esconde, entre el santuario de la Virgen de la Ayuda y la Casa Josep Gros, una puerta de hierro forjado. Este irregular pasaje da acceso a unas pocas viviendas y no conecta con ninguna otra calle, formando un tranquilo y silencioso callejón sin salida. A lo largo de este espacio, las plantas crecen en macetas dispuestas a ambos lados, creando un pequeño jardín improvisado que convierte el lugar en un patio interior, desde el cual se puede ver un trozo de cielo. 

Volta de la Perdiu

Volta de la Perdiu Inma Santos

Como explica la colaboradora de Metrópoli Inma Santos, este lugar es conocido como la calle Volta de la Perdiu. Según el nomenclátor de Barcelona, su nombre hace referencia a los antiguos puestos de venta de “perdiz”, que se refiere a las “asaduras” (vísceras como el pulmón y el corazón) de los animales. Tal vez sea cierto, ya que muy cerca se encuentra la calle de las Freixures, donde en el pasado se asentaban los vendedores de bofes. No obstante, lo más destacado de esta callejuela sin salida, que ha perdurado como un pasaje casi privado, es la bóveda de cañón (o "volta" en catalán) que da acceso y que forma parte de su nombre.

Historia

Se construyó en 1854. Josep Gros solicitó permiso para reconstruir la casa en la esquina de Sant Pere Més Baix y Freixures, con un proyecto diseñado por el arquitecto Josep Ràfuls. Cinco años más tarde, presentó otro proyecto a cargo del arquitecto Francesc Vila, para el edificio contiguo a la Volta de la Perdiu. 

Este edificio está protegido. En su parte inferior se encuentran los portales, que se extienden también al entresuelo, con arcos de medio punto que sostienen pequeños balcones en esta planta. De la clave de estos arcos nace una ménsula estriada, sobre la cual reposan los balcones del primer piso, hechos de loseta de piedra y barandillas de hierro.