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Alimentación sólida en bebés: ¿cuándo y cómo?

Los pediatras recomiendan esperar hasta que el bebé tenga unos seis meses de edad, puesto que hasta entonces la leche materna es la mejor opción 

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La leche materna es todo lo que los bebés necesitan en sus primeros meses de vida. Es un alimento completo. Tiene todos los nutrientes necesarios que el lactante requiere para crecer. También aporta defensas naturales que ayudan a evitar numerosas enfermedades. Incluso establece una relación afectiva entre madre e hijo, favoreciendo el desarrollo neurológico del niño.

Muchos organismos de la salud y profesionales de atención médica recomiendan amamantar a los bebés durante los seis primeros meses. Durante ese tiempo, la leche materna o la fórmula son el único alimento que necesita el recién nacido.

Las dudas de los padres

Añadir alimentación sólida es una etapa fundamental en el desarrollo de los bebés. Sin embargo, muchos padres se preguntan cuál es el momento adecuado para introducir nuevos alimentos en la dieta de sus hijos y si esto influye en la aparición de alergias alimentarias.

Entre el cuarto y el sexto mes de edad, los bebes estarán listos para empezar a aceptar alimentos sólidos como complemento a la lactancia materna o formula. Es importante reconocer las señales que indican que el bebé está listo para comenzar con otros alimentos, según su desarrollo motor, ya que no todos los niños van a adquirir estas capacidades a la misma edad. Se trata de un proceso que debe aplicarse como complemento y no como sustitución de ésta.

¿Cuándo cambiar la dieta?

Las principales asociaciones de pediatría coinciden en que la introducción de alimentos sólidos debe realizarse entre los 4 y 6 meses de edad.  “La introducción de los alimentos debe de ser realizada de una forma temprana y no prolongarlo más allá de un periodo específico de edad”, aclara el doctor José Arroyave, del Servicio de Pediatría del Hospital El Pilar.

Para determinar si el bebé está listo para aceptar alimentación sólida, es importante observar, que el bebé ha adquirido destrezas psicomotoras como presentar un interés activo por la comida, la desaparición del reflejo de extrusión (expulsión de alimentos no líquidos con la lengua), ser capaz de coger comida con la mano y llevarla a la boca, y poder sentarse con apoyo. “Una vez nosotros observemos que los bebés tienen los hitos de desarrollo apropiados para la alimentación, se puede valorar la introducción de los alimentos”, explica el especialista. 

Como cualquier otro hito del desarrollo, no todos los niños lo van a adquirir al mismo tiempo, pero estos cambios suelen ocurrir en torno al sexto mes. "Se desaconseja demorar el inicio de la alimentación suplementaria por encima de las 26 semanas de edad, ya que esto puede aumentar el riesgo de problemas nutricionales, como el déficit de hierro", añade.

¿Influye la introducción temprana en las alergias?

Existe la leyenda urbana de que demorar la introducción de alimentos sólidos puede reducir el riesgo de alergias alimenticias. Sin embargo, el doctor Arroyave desmiente esta corriente de opinión: “Sí es un mito que retrasar la alimentación de los bebés va a disminuir el riesgo de alergias alimenticias”, asegura.

Las recomendaciones de la alimentación complementaria y en especial de los alimentos alergénicos han cambiado numerosas veces a la luz de nuevas investigaciones y actualmente se recomienda la introducción pronta de dichos alimentos. Diversos estudios han demostrado que ofrecer ciertos alimentos potencialmente alergénicos en edades tempranas puede ser beneficioso. “En especial, dentro de la variedad de los alimentos que introducimos, es recomendable incluir alimentos que sabemos que son altamente alergénicos, como el cacahuete, pescado y huevo”, menciona el pediatra. No obstante, la introducción debe hacerse de manera progresiva y bajo supervisión médica en caso de antecedentes familiares de alergias.

La importancia del seguimiento pediátrico

Cada bebé es único, por lo que contar con la orientación de un especialista es clave para garantizar un proceso seguro. “Siempre es recomendable que los papás acudan con su pediatra de cabecera para que pueda él recomendarles o indicarles el inicio de la alimentación en el momento propicio, especialmente si tenemos antecedentes de alergia alimenticia o algún trastorno digestivo”, enfatiza el doctor Arroyave.

Si deseas conocer más sobre este y otros temas relacionados con la crianza, puedes encontrar contenido similar en la nueva sección de la web de Quirónsalud, ‘Escuela de familias.