El bus náutico durante su inauguración

El bus náutico durante su inauguración EUROPA PRESS

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El barco para recorrer el puerto de Barcelona por menos de dos euros: conecta dos puntos clave y funciona todo el día

Este servicio operado por catamaranes que se alimentan gracias a sus placas solares ha ganado popularidad para desplazarse por el mar en la capital catalana 

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En pleno verano y con la ciudad llena de turistas, Barcelona ofrece una alternativa de transporte cómoda, económica y sostenible que cada vez gana más adeptos: el barco-bus eléctrico del Port Vell, también conocido como Bus Náutico.

Este servicio conecta en apenas 10 minutos dos de los puntos más visitados de la ciudad: La Rambla y la playa de la Barceloneta, por un precio simbólico de 1,90 euros.

Un transporte ideal para turistas y locales en verano

El verano en Barcelona es sinónimo de turismo, paseos por el centro histórico, tardes de playa y una movilidad urbana que, en ocasiones, se ve saturada.

En este contexto, el barco eléctrico del Port Vell se presenta como una opción ideal para moverse por la ciudad sin estrés, sin tráfico y sin aglomeraciones.

Imagen del bus nàutic en la Dársena Real

Imagen del bus nàutic en la Dársena Real Port de Barcelona

Con más de 25 millones de visitantes al año, la capital catalana se enfrenta al reto de mantener una movilidad eficiente sin renunciar a la sostenibilidad. Este catamarán eléctrico permite a turistas y residentes cruzar el puerto de forma rápida y ecológica, al tiempo que disfrutan de unas vistas únicas del skyline barcelonés.

¿Cómo funciona el barco-bus del Port Vell?

Operado por la empresa Alsa, el Bus Náutico une el Moll de Drassanes (cerca del Mirador de Colón) con el Moll de Llevant, a escasos metros de la playa de la Barceloneta. El trayecto dura unos 10 minutos y se realiza en modernos catamaranes 100 % eléctricos, sin emisiones contaminantes.

Estos barcos, llamados Ecocat Dos y Ecocat Tres, están equipados con placas solares capaces de cubrir el 40 % del consumo energético a bordo, lo que se traduce en un ahorro de hasta 180 toneladas de CO₂ al año.

Horarios, precios y accesibilidad

Durante el verano, el servicio opera de 09:30 a 21:30 horas, con una frecuencia variable de entre 15 y 35 minutos. En invierno, los horarios se ajustan ligeramente: de 08:30 a 20:30 h.

  • Billete sencillo: 1,90 €

  • Ida y vuelta: 2,85 €

  • Bono de 10 viajes: 13,30 €

  • Suplemento por bicicleta o patinete no eléctrico: 1 €

El acceso está adaptado para personas con movilidad reducida y el embarque es rápido y cómodo, sin necesidad de grandes desplazamientos. El servicio también admite perros pequeños en transportín y es apto para familias con cochecitos.

La playa de la Barceloneta llena de gente a reventar / VERÓNICA MUR

La playa de la Barceloneta llena de gente a reventar / VERÓNICA MUR

Una experiencia turística por sí sola

Más allá de ser un simple medio de transporte, el barco ofrece una experiencia visual única. Los pasajeros pueden contemplar el puerto deportivo de Marina Vela, los cruceros atracados, el icónico Hotel W y el mar Mediterráneo desde una perspectiva privilegiada. Todo ello sin ruidos, sin humo y sin aglomeraciones.

Además, durante eventos como la 37ª Copa América, el Bus Náutico ha sido clave para facilitar el acceso a las zonas de visualización y el village del evento. La acogida del servicio ha superado las expectativas y confirma que la movilidad del futuro ya ha llegado al frente marítimo de la ciudad.

Recuperando el puerto para la ciudadanía

El Bus Náutico forma parte del Plan Estratégico 2025–2030 del Port de Barcelona, que busca integrar el puerto con la ciudad y devolver estos espacios a la ciudadanía. La reapertura del Moll de Pescadors, cerrado durante más de un siglo, y la urbanización de la Bocana Nord, son algunas de las actuaciones que acompañan este objetivo.

Este verano, ya sea para llegar a la playa, evitar el tráfico o disfrutar de una travesía corta con encanto, el barco eléctrico de Barcelona se ha convertido en una alternativa práctica, turística y sostenible que vale la pena descubrir.