De Ciudad de México a Londres y a Barcelona. Actualmente, investiga neuroimagen en Bellvitge, gracias a una beca de ‘La Caixa’ y desde sus inicios, se centró en estudiar las adicciones entre los jóvenes. Él es Víctor De la Peña, siempre curioso por el funcionamiento del sistema nervioso cerebral y cómo éste reacciona a la toma de determinadas sustancias adictivas.

De sus estudios, concluye que la marihuana es la droga más consumida entre los jóvenes españoles y hay un aumento significativo de nomofobia entre adolescentes. O sea, miedo irracional a salir de casa sin el teléfono móvil o vivir sin tenerlo cerca, pero la ansiedad también acampa cuando pasan días sin usar internet o sin jugar a videojuegos.

Las causas a estas adicciones son múltiples. Víctor remarca cómo influye la situación socioeconómica adversa en la que viven algunos jóvenes o el entorno social que les rodea. “En América Latina, en general, la situación social no ayuda a los jóvenes a prevenir ciertas adicciones y la base de la ansiedad es la incertidumbre sobre su futuro, pero no es un fenómeno solo de allí, en Europa, también pasa”.

UNA ADICCIÓN NO SE CURA, SE REHABILITA

Los menores de 25 años que consumen alguna droga tienen más probabilidades de ser adictos en edad adulta pero también puede ser un consumo pasajero. Sobre todo, si se trata del alcohol. “Una adicción se rehabilita, no se cura”, asegura el especialista; pero “ésa es la motivación de quienes quieren dejar de ser adictos y llevar un estilo de vida saludable”. Es más, “los que consiguen rehabilitarse son quienes no tienen tabús para hablar del tema. Saben hablar con los adictos, que a veces, los médicos no saben”.

SOLUCIONES

Para prevenir las adicciones, Víctor no duda en aclarar que es necesario mejorar las políticas públicas, ampliar la investigación de campo para disponer de mejores terapias y la no estigmatización de la salud mental hacia las personas adictas o depresivas.

“No basta con brindar información en las áreas de ocio donde se divierten los jóvenes, sino que hay que educar a los jóvenes para que sea capaz de tomar decisiones responsables y sepan controlar sus emociones. La adicción es un problema de la motivación”.

En cuanto a la regulación del consumo, Víctor toma de ejemplo algunos países del norte de Europa que “han destinado mucho tiempo y recursos para preparar a sus sociedades. Aquí aún falta tiempo y América Latina, aún está demasiado lejos para ello”.

ADICCIONES EN LA TERCERA EDAD

Sin embargo, si los jóvenes son adictos a sustancias ilegales o a dispositivos móviles, hay otro grupo se la población que no se debe olvidar, según el especialista y son los más mayores. “Las adicciones de la tercera edad se basan en el consumo excesivo de pastillas para dormir que sólo pueden tomar tres semanas pero, al final, las toman más tiempo. Se trata de un consumo con prescripción médica que debería solucionarse con más terapia para el sueño y la ansiedad y menos pastillas”.

Víctor de la Peña, de México a Barcelona



LOS BÚNKERES DEL CARMEL RESTAN ANSIEDAD

La intensidad laboral que asume Víctor sobre las adicciones, las afronta con mucho empeño profesional y en sus ratos libres, relaja la ansiedad de su trabajo yendo a uno de los balcones de Barcelona con mejores vistas de la ciudad, los búnkeres del Carmel. Para el especialista mexicano, “Barcelona tiene playa, montaña, historia y modernidad. Es una ciudad única”.

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