La cultura mexicana se personifica en Barcelona
La artista Lupita Sierra se convierte en Catrina para reivindicar el Día de Muertos
2 noviembre, 2018 18:46Noticias relacionadas
Se divide la melena en dos, la coloca sobre los hombros y en pocos segundos las trenza. Pinta toda su cara de blanco, los ojos de rojo, naranja por encima, los delinea de negro, los labios de rojo y con purpurina de cada color. Han pasado 15 minutos y su cara ha cambiado por completo. “Esto es como maquillaje de payaso, ya verás luego, los detalles lo son todo”, asegura sin soltar los pinceles.
“Soy Guadalupe Rocío Sierra Saenz, pero la comunidad mexicana en Barcelona me conoce como Lupita Sierra, la mexicana”, se presenta la artista. Tras 40 minutos está lista. Se ha convertido en Catrina y además del maquillaje, ha reemplazado los tejanos y la camiseta negra por un vestido de gala típico mexicano, negro hasta el suelo con un cinturón amarillo.
Lupita, además de caracterizarse, maquilla a otras cinco Catrinas para el evento que ha montado el Consulado de México en homenaje al Día de los Muertos, que se realiza en la tarde de este viernes en el Museo de las Culturas del Mundo, en el barrio del Born.
LA HISTORIA DE LAS CATRINAS
“En los años de Porfirio Días y Benito Juárez empieza un período de rebeldía en México, de crítica social, y es allí cuando José Guadalupe Posada empezaba a dibujar a aquellos mestizos mexicanos o españoles que se creían mejor que el resto y que querían imponer la cultura europea en México. Entonces los personificaban como muertos, para decir que se iban a morir esperando que la cultura europea toque tierras mexicanas”, relata Lupita.
Finalmente, fue Diego Rivera quien da el nombre a la Catrina, al pintarse él junto a su mujer Frida Kahlo y este personaje en el medio de ambos.
“Este concepto de la calavera de Posada con el nombre de Rivera ha dado entidad a las Catrinas que son el principal elemento de homenaje a la muerte en México”.
LA INFLUENCIA DEL CINE
Lupita cuenta que llegó a Barcelona cinco años atrás para bailar y poco a poco fue explotando su faceta de artista del maquillaje. Curiosamente, hace algún tiempo comenzó a recibir pedidos para maquillar Catrinas y personas relacionados a la cultura mexicana. “Me piden mucho maquillar Catrinas tras las películas como la de James Bond o Coco”, confiesa.
Pero para Lupita eso no es un problema, al contrario. “Me considero mexicana de hueso colorado, es algo que me vibra por dentro y me encanta poder transmitir mi cultura a partir de lo que son mis pasiones como el baile, el maquillaje, el folclore, y un poco de actuación”, detalla la artista y asegura que el márketing que han tenido las películas, ha sido positivo porque “han dado mucha difusión a nuestra cultura”.