El Ayuntamiento de Ada Colau ha impuesto a la empresa Casino de Barcelona SA, gestora del local sito en la planta baja del hotel Arts, una liquidación de 18,4 millones de euros. El correctivo está relacionado con la tasa de actividades económicas, que el consistorio carga a cuantos negocios y empresas se encuentran domiciliados en la ciudad.
El 24 de febrero de 2020, el Instituto Municipal de Hacienda del consistorio comunicó a la sociedad el inicio de actuaciones de comprobación del citado impuesto. El periodo inspeccionado abarca los ejercicios fiscales de 2015 a 2018.
RECURSOS
Tras concluir su trabajo de verificación, los recaudadores de Colau extendieron a la empresa, con fecha 3 de agosto último, dos actas de liquidación por un importe conjunto de 18,4 millones.
La compañía las firmó en disconformidad y de inmediato interpuso recursos ante los organismos administrativos y judiciales. Sus asesores legales entienden que “no existe riesgo probable de que recaiga una resolución desfavorable a los intereses del grupo”.
Casino de Barcelona SA declaró en 2019 un beneficio neto de 14,9 millones, por lo que el leñazo tributario de Colau rebasa con largueza las ganancias de todo ese ejercicio.
Casino de Barcelona
AÑO INFAUSTO
En 2020, el ramo del juego sufrió las restricciones derivadas del coronavirus. El turismo se esfumó a partir de marzo. Y desde octubre, está cerrado por orden gubernativa el sector entero del juego en Cataluña, que comprende los casinos, los bingos y las salas de máquinas tragaperras.
En consecuencia, los resultados de la empresa en 2020 acusarán el duro impacto de las limitaciones y el cese comercial, más las provisiones que la casa haya tenido que constituir por el acta fiscal del Ayuntamiento.
TRES CASINOS
El salón de apuestas es el único de su género abierto en la Ciudad Condal. Hasta la irrupción de la pandemia aportó el negocio más rentable de Grupo Inverama, propiedad de los hermanos Suqué Mateu.
Esta potente corporación familiar alberga tres unidades de actividad: juego y espectáculos, industrial y vinícola. La primera de ellas reúne tres de los cuatro casinos abiertos en Cataluña, a saber, los de Barcelona, Tarragona y Peralada. Este último contabilizó en 2019 un beneficio de 1,4 millones; el de Tarragona perdió casi medio millón y el de Barcelona ganó 14,9 millones.
ESPECTÁCULOS, PLÁSTICO Y BODEGAS
En la división de ocio del grupo se encuadra el recinto del Castillo de Peralada. Su oferta incluye restaurante, hotel, golf, museos, bodega y visita guiada a las plantaciones de vides que se extienden por el municipio del Alt Empordà.
La faceta industrial de Inverama se refleja en sendas fábricas productoras de film plástico reciclable ubicadas en Portugal y Polonia.
Por último, la sección vinícola agrupa bodegas acogidas a las denominaciones de origen Empordà, Cava, Priorat, Ronda, Navarra, Ribera del Duero y Rioja. El grupo proporciona empleo a casi 1.200 personas. Hasta la irrupción del Covid, los casinos de Inverama venían ingresando a las arcas de la Generalitat más de 25 millones en impuestos y tasas del juego.