El espacio gastronómico del hotel Meliá ME de Barcelona se encalla: el Grupo Salvaje, desahuciado por impagos
Tasteat, el opulento ágora gastronómico del paseo de Gràcia, eterniza su apertura y entra en una batalla judicial con el grupo de restauración
8 julio, 2024 23:30Noticias relacionadas
Cuando parecía que el espacio gastronómico Tasteat de paseo de Gràcia iba a abrir tras tres años encallado, una nueva pesadilla ha acechado a la promotora Actual Capital: la caída a los infiernos del Grupo Salvaje. El restaurante que ocupaba el antiguo local de Messi en Enric Granados decidió mudarse al opulento Tasteat e invirtió dos millones de euros en la reforma, pero ahora ha impagado la renta y el IBI antes siquiera de la apertura al público. Un nuevo capítulo que eterniza la puesta en marcha de este espacio gafado, situado en los bajos del ME by Meliá (la marca de lujo bajo la que opera la cadena hotelera mallorquina).
El Grupo Salvaje ha intentado retrasar su desahucio alegando que esperaban aportaciones de fondos por parte de socios inversores o que estaban pendientes del traspaso de su antiguo local de Enric Granados. Pero lo único fehaciente han sido los impagos, que han obligado a la constructora y a la dirección facultativa a parar las obras por no haber podido cobrar las diferentes certificaciones. “Nunca nos han contado la verdad, han ido explicando excusas de mal pagador”, exponen desde Actual Capital a Metrópoli.
"No nos moverán"
De momento, Salvaje se ha negado a entregar las llaves de forma voluntaria y ha iniciado una guerra judicial con la propiedad. En caso de que el grupo siga enrocado, en septiembre se procederá al desahucio forzoso del local, tal y como ha decretado un juez. Los dos millones de euros invertidos por Salvaje en el Tasteat corren el riesgo de esfumarse sin ningún retorno para la firma.
La delicada situación económica de Salvaje se explica en Madrid. Según exponen fuentes del mercado, el restaurante que abrieron en pleno barrio de Salamanca les ha ido “muy mal”, pues la instalación les costó el doble de lo previsto y no tuvo el retorno esperado. El SLVJ Madrid Velazquez –así se llama la marca del grupo en la capital– se ubica en el interior del Bless Hotel y ofrece una gastronomía nipona con toques exóticos; además de coctelería, música en directo y espectáculos de todo tipo.
Salvaje no convence a la burguesía catalana
El pinchazo (aún no consumado, pues el local permanece abierto) de Madrid ha sido posterior al de Barcelona, pero no menos sonoro. El Grupo Salvaje abrió en el número 86 de la calle Enric Granados, donde previamente había fracasado el Bellavista del Jardín del Norte, propiedad de Leo Messi. Salvaje ofrecía comida japonesa con un espacio de coctelería, espectáculos, animación y música, entre una decoración fastuosa, con estatuas de animales dorados y reservados exclusivos.
Todo estaba pensado para que la burguesía más granada de Barcelona pudiera ver y dejarse ver: pero no convenció a la clase alta catalana, más afrancesada y amante de la discreción que la madrileña. Salvaje había exportado un modelo latino que le había funcionado en Panamá, Bogotá y Miami; y que incluso en Madrid contó con cierto recorrido; pero que en Barcelona fracasó por completo. “Era muy hortera, como de nuevo rico”, señala un operador de la zona a este digital. Además, sumaron un poderoso enemigo: los vecinos de la calle, la plataforma SOS Enric Granados, que denunció el sonido del reggaeton que fluía a todo volumen cuando caía la noche.
La nueva vida del Tasteat tras el adiós de Salvaje
Mientras, el Tasteat tendrá que buscarse la vida y encontrar un nuevo inquilino. El grupo ya está en negociaciones con diferentes cadenas de restauración para desatascar el proyecto, que fue anunciado a bombo y platillo en 2021 y aún permanece encallado. De momento, ya tienen firmado al socio Yatai Food Market, y falta un segundo operador que se instale en los 600 metros cuadrados de la planta -1.
Son numerosos los reveses que invitan a pensar que este lugar está maldito. Hasta hace unos años, el alojamiento estuvo ocupado por el cine y teatro Novedades. Cuando Actual quiso convertir el inmueble en un hotel con un espacio foodie, se encontró a un enemigo inesperado: el Ayuntamiento de Barcelona, que entonces comandaba Ada Colau. El consistorio frenó el desarrollo del proyecto con una moratoria de las licencias hoteleras en 2015, pero Actual Capital peleó en los tribunales y terminó venciendo a Colau. El hotel fue finalmente inaugurado en 2021, pero el espacio gastronómico no corrió la misma suerte.
Todos los enemigos del espacio gastro
La pandemia había frenado las inversiones de la restauración en los bajos del Meliá, lo que provocó que el hotel echara a andar sin su anexo gastronómico. No ocurrió lo mismo en los tres restaurantes del interior, que fueron ávidamente ocupados por Belbo Collection, propiedad de la firma Stoneweg. Para hallar operadores, Actual se había encomendado a la Sociedad de Centros Comerciales de España (SCCE), una de las firmas más reputadas de España y gestora de más de veinte centros comerciales, entre ellos l'Illa Diagonal. Sin embargo, la falta de acuerdos segó la paciencia de la propiedad, que decidió desvincularse del contrato.
Ahora, una vez cerradas las etapas Colau, SCCE y Salvaje, la propiedad espera que este sea el último episodio de una larga pesadilla, y el Tasteat se ponga en marcha este mismo año.