Salvat, los laboratorios de Esplugues que ingresan 73 millones vendiendo cristalmina y otros fármacos
La empresa ganó más de 10 millones y su propietario, Javier Peris Mussó, se embolsó un dividendo de 7,8 millones
9 julio, 2024 23:30La famosa cristalmina es de Esplugues de Llobregat y hace de oro a su propietario, los Laboratorios Salvat. Este antiséptico para heridas y quemaduras, cuyos botes azules están presentes en casi todos los hogares de España, es la gallina de los huevos de oro de la farmacéutica catalana Salvat, que la vende desde 1986 en boticas y supermercados.
El grupo presenta una incesante trayectoria alcista, que en 2022 –últimos resultados disponibles– le llevó a facturar 73 millones de euros, un 16% más que el año anterior. El beneficio subió también un 16% y superó limpiamente los 10 millones.
Deudas pírricas
El grupo amasa un patrimonio de 48 millones y unos activos de 62, de los cuales 6 millones son tesorería y 20 cuentas a cobrar. Su deuda con entidades financieras es de apenas 2,4 millones.
Cada año, Laboratorios Salvat invierte el 15% de sus ingresos en investigación y desarrollo de nuevos fármacos, una cifra que en 2022 fue de 11 millones.
Apuesta por la I+D
Gracias a esa inversión, en estos momentos alberga una cartera de productos en diferentes fases de desarrollo, en áreas como urología, dermatología, otorrinolaringología, antibióticos, afecciones respiratorias y medicina preventiva. Además de la cristalmina, comercializa artículos como Monolitum, Relive, Levogastrol y Cetraxal.
En 2022 también finalizaron los estudios clínicos que tenía en marcha en Estados Unidos y en Europa, y entraron en periodo de evaluación por parte de las autoridades sanitarias americanas. Si pasan el control oficial, tal como está previsto, la empresa barcelonesa ampliará de forma notable su presencia en el mercado americano.
Salvat, a por el 'American Dream'
Es en Estados Unidos donde el grupo quiere apuntalar su crecimiento futuro. La empresa tiene una filial en el país desde 2006 y una planta de producción en Tamarac, en el estado de Florida.
También posee plantas en Esplugues de Llobregat y en Alcalá de Henares, así como equipos de ventas propios en Portugal, América central y del sur, África, Oriente medio, sudeste asiático y China.
Empresa familiar catalana
El capital de la empresa es enteramente familiar y pertenece a la sociedad holding Imperia P, propiedad de Javier Peris Mussó. A raíz de las turbulencias políticas catalanas, el empresario trasladó la sede social de su corporación Imperia a Palma de Mallorca. Allí permaneció hasta diciembre de 2022, cuando retornó a casa y volvió a fijar el cuartel general en Esplugues de Llobregat, en las instalaciones de los Laboratorios Salvat.
Estos desembolsaron en 2022 un jugoso dividendo de 7,8 millones, una política ampliamente repetida por Salvat: en los dos anteriores ejercicios ya había destinado una cuantía de 16 millones a esta partida.
Casi 70 años de historia
El consejo de administración está presidido por el citado Javier Peris Mussó, a quien acompañan José Martínez Mariñosa como consejero delegado y, como vocales, Hugo Peris Pallarés, Manuel Alberto Bueno Gallego, Mercedes Regany Terradellas, Vicente Soto Ibáñez y María Luisa Poncela García.
Salvat nació en 1955, de la mano de Tomás Miarnau y el Dr. Antoni Salvat Navarro, quienes fundaron la compañía para comercializar las vacunas que el bacteriólogo Salvat había estudiado y fabricado desde 1917.