El presidente del grupo municipal de ERC, Alfred Bosch, se ha quedado solo en la defensa de realizar una consulta sobre el futuro del albergue en la Vila Olímpica.  Tal y como anunció el pasado 29 de marzo junto al presidente de la Asociación de vecinos de la Vila Olímpica, Jordi Giró, este viernes ha llevado la propuesta al pleno del Ayuntamiento. Pero la proposición no tendrá mayor recorrido ya que ha contado con el rechazo de Barcelona en Comú y la abstención del resto de grupos.

En su intervención, y antes de desvelarse las votaciones, Alfred ha criticado la saturación de ocio que se vive en esta zona turística de Barcelona y ha instado al grupo que lidera Ada Colau a votar en favor de la consulta haciendo honor a esa imagen de la alcaldesa de las consultas de la que ha hecho bandera. “Aquí tiene una oportunidad de oro. Si no lo aprueba, consideraremos que todo ha sido un engaño monumental”, ha sostenido Bosch.

Por su parte, el equipo de gobierno en boca de la teniente de alcaldía de urbanismo, Janet Sanz, ha lamentado la falta de herramientas para evitar este tipo de construcciones y ha recordado que no se puede frenar el futuro del albergue de la discordia en la Vila Olímpica, de 440 plazas, porque cumple con los requisitos legales. “El proyecto no nos gusta pero la licencia está correctamente otorgada. También estudiamos otras opciones”, ha defendido Sanz, quien a su vez ha criticado que ERC les señalara por no querer hacer una consulta que no impedirá su construcción. Un rifirafe entre ERC y Barcelona en Comú muy significativos ya que precisamente ellos fueron los partidos que tiraron adelante el Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (PEUAT), el mismo que no incluye las obras del albergue por aprobarse con anterioridad.

CONSULTA CUESTIONADA

El resto de partidos han dejado claras sus dudas ante la propuesta de ERC. Desde el grupo municipal Demòcrata, que ha votado abstención, se ha preguntado a los representantes gubernamentales si se habían puesto en contacto con los vecinos afectados y desde el equipo municipal de Ciutadans, Koldo Blanco ha recordado que ante esta cuestión, “el ayuntamiento no tiene margen de maniobra”. Para ellos, la solución pasa por el diálogo entre las partes afectadas.

El popular Alberto Fernández Díaz ha pedido que no se engañe a los vecinos porque todos los representantes políticos saben que no quieren el albergue y que más allá de ratificar la postura, la consulta no tendría consecuencias. De esta forma, se ha sumado a C’s en la abstención de su voto.

El grupo municipal de la CUP ha lamentado que a pesar del PEUAT, se sigan viviendo situaciones como la del albergue de Vila Olímpica, resultado del turismo que vive la ciudad y que cuenta con el rechazo frontal de los vecinos. “Si ERC y el gobierno municiapal llegaron a un acuerdo con el PEUAT, han de cumplir el pacto y no llevar sus trifulcas al plenario”, ha reclamado Maria José Lecha. La concejala también ha sostenido que su partido propuso hacer extensivas este tipo de consultas al resto de la ciudad pero que en este caso, se abstenían.

PLANES ALTERNATIVOS

Una de las propuestas encima de la mesa gubernamental era la compar del edificio. Pero el informe elaborado por el Ayuntamiento ha descartado esta posibilidad porque según consideran, “sería necesario justificar, además del interés general de la operación, la necesidad de adquirir el inmueble”. En otro informe encargado a la UPC se cifra en más de 15 millones de euros el coste que supondría la expropiación.

Para los vecinos, esta operación es innecesaria, pues proponen la expropiación de la licencia de obras, operación que calculan que supondría un desembolso de 317.000€, asumible para el fondo de contingencias municipal, que cuenta con 16 millones de euros de fondos.

 

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