Miles de personas, (200.000 según los organizadores y solo 7.000 según la Guàrdia Urbana), han participado este mediodía en la manifestación que Societat Civil Catalana (SCC) había convocado en Barcelona bajo el lema ‘Ahora más que nunca, seny’ para denunciar la actual situación de bloqueo de la política catalana, que sigue sin Govern tres meses después de las elecciones autonómicas. Según la entidad, la concentración ciudadana ha tenido como objetivo elevar una vez más su voz para pedir “unidad y convivencia de una mayoría social que desea vivir en paz”.
La marcha se ha iniciado poco después de las 12:15 en la avenida Marquès de Argentera, ha transcurrido por ella y ha finalizado no muchos metros después, frente a la estación de Francia, donde ha estado situado el escenario, ya muy cerca del Parc de la Ciutadella.
A lo largo de la marcha, los manifestantes han mostrado pancartas con mensajes como ‘Estamos hartos’, 'Viva el Rey' y ‘Som Catalunya, somos España’, carteles en apoyo a la Guardia Civil y la Policía Nacional y multitud de banderas españolas, catalanas y europeas. Los gritos más coreados han sido las consignas ‘Que no nos engañen, Cataluña es España’ o ‘Puigdemont, a prisión’.
Entre las personalidades que han encabezado la manifestación se encontraban el ex primer ministro socialista francés Manuel Valls, junto a quien también han caminado dirigentes de los partidos políticos del PP, como Xavier García Albiol, Andrea Levy, la ministra Dolors Montserrat y el delegado del gobierno Enric Millo; de Ciudadanos, como Albert Rivera y Juan Carlos Girauta, y del PSC, como Miquel Iceta, Salvador Illa, Núria Marín y Carles Ruiz.
También han estado presentes en la manifestación el ex fiscal anticorrupción Carlos Jiménez Villarejo o la actriz Rosa María Sardà, que posteriormente ha sido la encargada de dirigir en el escenario los diferentes parlamentos de algunos de los principales asistentes.
Los manifestantes han criticado la deriva independentista / HUGO FERNÁNDEZ
RIVERA, POR PARTIDA DOBLE
En declaraciones a la prensa al inicio de la manifestación, Albert Rivera ha afirmado que acudía a la marcha para defender “la Constitución, el Estatut y la unión de los españoles”, así como un Govern “para todos los catalanes, algo difícil con los independentistas al frente”. Rivera ha recalcado que también apoyaba la manifestación para exigir a PP y PSOE que “dejen de pensar en sus partidos” y desbloqueen la reforma de la ley electoral, de la que “los principales beneficiarios son los nacionalistas”.
“Cataluña merece un Govern sin imputados, sin rebelión, sin sedición, sin corrupción y para todos los catalanes”, ha sentenciado el líder de C’s.
Rivera ha aprovechado también para celebrar la encuesta de La Vanguardia que da la victoria a su partido, en el caso de que hoy mismo hubiese elecciones en España. “Apuntan a un cambio de ciclo debido al hartazgo del bipartidismo entre los españoles”, ha dicho Rivera. “El sondeo va en la línea de todas las encuestas y señala que el auge de nuestro partido no es solo en el electoral catalán, sino que apunta a un cambio estructural”.
Manuel Valls, entre Albert Rivera y JIménez Villarejo, en primera línea / HUGO FERNÁNDEZ
PELIGRO DE GUERRA
Una de las voces más escuchadas en los parlamentos ha sido la de Manuel Valls, quien previamente, en declaraciones a Catalunya Ràdio, había afirmado que “el proceso independentista ha fracasado y lo que ahora me preocupa son las fracturas de la sociedad catalana”. Valls ha llegado a asegurar, incluso, que “el proceso separatista catalán no tiene sentido y ha fracasado. Una Catalunya independiente no tendría cabida hoy en la Unión Europea”.
Más aún, Valls ha alertado de que “cambiar ahora las fronteras en Europa es guerra para mañana. Los 70 años de paz en el continente son un periodo único en la historia, pero sería absurdo pensar que no puede volver a ocurrir, que no se puede repetir la guerra como hemos visto en los últimos tiempos en Yugoslavia o, más recientemente, en Crimea”.
Societat Civil Catalana había convocado para el pasado sábado una concentración parecida en la plaza Colón de Madrid bajo el lema ‘Dos colores, un sentimiento’. Sin embargo, acabó desconvocándola y posponiéndola debido a las malas condiciones meteorológicas (frío y nieve) que se dieron en la capital de España.