El final de la manifestación de los policías nacionales y guardias civiles en la plaza de Catalunya y la llegada de centenares de independentistas radicales en los alrededores de la plaza han vuelto a provocar nuevas cargas de los Mossos d'Esquadra con los más radicales para contenerlos.
Los momentos de mayor tensión se han vivido en la calle de Bergara y en Ronda Sant Pere, donde los agentes han golpeado con dureza con las porras contra algunos manifestantes. A lo largo de la concentración, la policía autonómica ha detenido a seis personas. A los arrestados se les acusa de un delito de atentado contra la autoridad. El Sistema de Emergencias Médicas ha elevado hasta 24 las personas heridas tras un primer balance de 14. Todos los heridos son de carácter leve, a excepción de una persona que está grave.
Tal era la tensión que en uno de los momentos, varios unionistas que abandonaban la manifestación entre medio de los independentistas han sido increpados y agredidos con botellas. Ante la confusión y los gritos se ha producido una estampida y nuevas cargas, y como consecuencia varias personas han resultados heridas.
Junto al Corte Inglés se han producido también otros enfrentamietos entre independentitas y ultras españolistas que han sido separados por los agentes de la policía autonómica. Se han visto brazos en alto al grito de "aquí tenéis la foto que queréis", ha dicho un ultra españolista, a lo que otro ha acompañado con un "a mi la legión". Los mossos están intentando alejar a los manifestantes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil.
Grupos de manifestantes radicales en el centro de Barcelona / LETICIA FUENTES
Los jóvenes manifestantes muestran los golpes recibidos por los Mossos d'Esquadra / LETICIA FUENTES
FASCISTAS INFILTRADOS
La tensión ha dido variando de zona y ha alcanzado los alrededores de la plaza de Catalunya. En un momento dado, un manifestante de la concentración del sindicato policial, Jusapol, ha confesado a los mossos que había grupos de fascistas infiltrados en su manifestación y les ha pedido que los detuvieran. Los mossos no daban abasto y han necesitado refuerzos.
A juicio de Metrópoli Abierta, el despliegue de mossos ha sido insuficiente para controlar a los manifestantes. Así ha quedado evidenciado en la plaza de Urquinaona, donde se han producido enfrentamientos entre los diferentes grupos de manifestantes. Algunos concentrados de la marcha de Jusapol han recibido lanzamientos de objetos, latas y botellas, cuando querían abandonar la zona por en medio de la concentración independentista, lo que se ha vivido como una provocación. Un manifestante independentista ha caído en el suelo y ha sido pisoteado por las personas que iban detrás suyo.
En estos momentos, la policía ha conseguido disuadir a los manifestantes y han restablecido el servicio de metro y Renfe de Plaza Cataluña que, hasta el momento estaba cerrado al público. Hasta ahora, el servicio de emergencia ha atendido a 14 personas por las cargas policiales (11 de carácter leve y otras tres han tenido que ser trasladadas a centro sanitarios).
Al finalizar las manifestaciones, la Guàrdia Urbana ha dicho que se han concentrado en el centro de la ciudad unos 6.000 independentistas y unos 3.000 participantes en la marcha de policías nacionales y guardias civiles.