El Gremi de Restauració critica la subida “elitista” de las terrazas
Consideran que con la "abusiva" propuesta de BComú y PSC perderán mucha clientela
22 octubre, 2019 16:40El Gremi de Restauració ha puesto el grito en el cielo. Tal como adelantó este medio, se opone al incremento de la tasa de terrazas en Barcelona. Este martes, a través de un comunicado, ha afirmado que “no da crédito” a la propuesta del gobierno de BComú y PSC, que propone multiplicar por cuatro el coste de una mesa de nueve metros cuadrados. Con la subida, pasarían a pagar 527 euros al mes, según se desprende de la propuesta de actualización y revisión de las Ordenanzas Fiscales para 2020.
“Es una medida elitista. La restauración de barrio perderá al cliente de toda la vida”, ha lamentado Roger Pallarols, director del Gremi de Restauració, a través de un comunicado remitido a Metrópoli Abierta. Para el Gremi, es inaudito que una administración incremente entre el 200 y el 400% la tributación que deben de asumir las empresas y que, además, lo haga justo después de los graves disturbios que ha sufrido Barcelona durante la última semana.
CONFÍAN EN UNA NEGOCIACIÓN
“¿Quién se puede permitir pagar cuatro euros por el café de media mañana?”, se pregunta. Porque, según calculan, comportará una "subida generalizada y lineal de los precios que pagan los clientes". Así, ha planteado un símil con una hipotética subida del 400% en el precio del alquiler. “No solo sería abusivo, sino que como sociedad nos indignaríamos, lo desaprobaríamos y, probablemente, los afectados recibirían la ayuda de los servicios municipales que atienden los casos de acoso inmobiliario”, desarrolla.
El Gremi confía en una negociación con el gobierno municipal. “Pedimos que la tasa se actualice de forma sensata, teniendo en cuenta la realidad de los negocios de restauración de la ciudad, sin tener que obliga a la ciudadanía a cambiar de hábitos”, concluyen. La propuesta de BComú y PSC se llevará a aprobación al pleno municipal de este viernes. Todo apunta a que se acabe tumbando y quede en agua de borrajas. Sin embargo, el consistorio tiene margen hasta diciembre para aprobar las ordenanzas fiscales.