El Tribunal Supremo ha ratificado la indemnización que deberá pagar el Govern a la familia de un profesor asesinado en Barcelona. Pese al recurso presentado por la aseguradora del Consorci d'Educació de Barcelona tras el fallo del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya, se abonará una indemnización de 250.000 euros y otros 41.000 euros en intereses para los padres y el hermano del docente Abel Martínez, al que mató un alumno en el instituto de Barcelona Joan Fuster, situado en La Sagrera.

De esta manera finaliza el procedimiento judicial, por lo que ahora se debe iniciar la ejecución de la sentencia, que determinó que hubo fallos de seguridad en el instituto de educación secundaria porque no se controló a un alumno que era conflictivo.

RESPONSABILIDAD DE LA ADMINISTRACIÓN

El abogado de la familia, José Antonio Calles, considera que esta sentencia sienta jurisprudencia en la responsabilidad de la administración en los centros escolares.

Este caso, sucedido en abril de 2015, tuvo una gran repercusión en la capital catalana por la brutalidad del acto. El estudiante, que tenía 13 años y cursaba segundo de ESO en el momento del crimen, hizo uso de una ballesta y un machete para acabar con la vida del docente, que estaba empleado como sustituto en ciencias sociales debido a la baja de la profesora titular del centro.

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