El sector inmobiliario han advertido este martes del riesgo que puede suponer la regulación de los precios de alquiler de vivienda en Barcelona.
La vicepresidenta de la Associació de Promotors de Catalunya (APCE), Elena Massot, ha apostado por aumentar la oferta de vivienda para que bajen los precios, y ha recordado que hay grandes planteamientos pendientes de desarrollar. "Se debe apostar por la colaboración público privada, estudiar la opción del derecho a superficie y el 'coliving'. También es necesario un plan estratégico de vivienda pactado entre administraciones, privados y afectados a 15 años vista", ha añadido.
Por su parte, el representante de la Cambra de la Propietat Urbana de Barcelona, Joan Ràfols, ha achacado la falta de vivienda de alquiler social al "control de los precios del alquiler entre 1920 y 1994" y a la gran presencia de viviendas de alquiler de renta antigua.
DESCENSO DE LAS PROMOCIONES
La secretaria general de Housing Europe, Sorcha Edwards, ha afirmado en relación a la reserva del 30% de las nuevas construcciones a vivienda social que la falta de uniformidad de la medida puede provocar un descenso de las promociones.
Pese a ello, la concejal de Vivienda de Barcelona, Lucía Martín, ha defendido la regulación de precios recordando que sólo el 30% de las viviendas ofertadas en alquiler en la ciudad están por debajo de los 1.000 euros.