La Guardia Urbana ha tenido que desalojar este domingo por la mañana el litoral de Barcelona de ciudadanos irresponsables que paseaban o, incluso, hacía deporte en la zona, ha explicado a Metrópoli Abierta fuentes de la policía local barcelonesa.
La situación se ha producido apenas unas horas después de la entrada en vigor del Real Decreto gubernamental que obliga a los vecinos a quedarse en casa -y salir solo para hacer la compra, ir al médico o a trabajar, entre otros supuestos- para evitar que el coronavirus se propague más entre la población.
CLAUSURADAS LAS ZONAS PARA HACER EJERCICIO
Agentes de la Guardia Urbana han tenido que avisar los usuarios que no podían esta allí. Entre otras actuaciones, la policía ha clausurado las zonas para hacer ejercicio del litoral, donde había decenas de personas, según las fuentes consultadas. Los guardias urbanos han peinado toda el frente marítimo, desde el Fòrum hasta el Hotel Vela.
Según fuentes de la Guardia Urbana, en el centro de la ciudad el tráfico de vehículos y de gente transitando han disminuido de forma considerable, aunque todavía se ven grupos de personas que deambulan sin un destino claro y que intentan engañar a los agentes cuando les interrogan dónde se dirigen.
"NO ESTÁ DE VACACIONES"
En el segundo vídeo incluido en esta información se ve como una patrulla de policía local avisa por megafonía a un usuario de que se vista y se vaya a su casa. "No está de vacaciones. Estamos en estado de alarma", dice el agente. Esta grabación no es de Barcelona ciudad, pero sí de la provincia, afirman fuentes policiales sin precisar de cuál.
Desde la policía local barcelonesa se hace un llamamiento a los hoteles de la ciudad para que se informe correctamente, y en distintos idiomas, a los huéspedes sobre las restricciones impuestas por el Gobierno español. Fuentes de la Guardia Urbana aseguran que todavía se ven a turistas paseando por las calles.
También los Mossos d'Esquadra están avisando de las restricciones de movimiento impuestas por el Ejecutivo que encabeza Pedro Sánchez. Incluso agentes de la policía autonómica han impuesto ya dos multas en Barcelona, como les ha sucedido a unos ciclistas cerca de plaza de Espanya que habían decidido salir a hacer deporte a pesar del veto.
El estado de alarma prevé multas en caso de incumplimiento por parte de los ciudadanos que van de los 100 a 600 euros, en caso de ser una sanción leve; de los 600 a 30.000 euros, en caso de infracciones graves, y entre 60.000 y 600.000 euros, en casos de incumplimientos muy graves.
Desde la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) se está haciendo difusión de los únicos movimientos que están permitidos para frenar la propagación del virus y entre los que no se incluyen hacer deporte o pasear. Desde el sindicato se recomienda quedarse en casa y salir solo en caso de necesidad imperiosa.