La familia del industrial Julio Muñoz Ramonet ha pedido al Ayuntamiento de Barcelona la devolución de las obras requisadas en febrero y marzo por la Guardia Civil porque "no pertenecen al legado otorgado" a la ciudad.
Lo ha dicho en un comunicado después de que la Guardia Civil y el Ayuntamiento explicaran en octubre que habían recuperado 474 obras desaparecidas y legadas al consistorio, y que tenían guardadas en sus domicilios y en almacenes las hijas de Muñoz Ramonet y dos nietos.
LA FAMILIA CARGA CONTRA EL AYUNTAMIENTO
"La práctica totalidad del legado se entregó judicialmente en 2013 salvo un inventario de 1971, que no había sido identificado por la Fundación en su demanda", y ha añadido que no existe ninguna resolución judicial que determine que las obras intervenidas son parte del legado a la ciudad.
"Por consiguiente, el Ayuntamiento de Barcelona no solo ha revelado el contenido de unas diligencias secretas, sino que ha comunicado información de forma precipitada y errónea", ha criticado.
3 MILLONES DE EUROS
Ha afirmado que las obras requisadas por la Guardia Civil en febrero y marzo no estaban ocultas ni escondidas: "Nada estaba escondido y todo pertenece a la intimidad familiar que el Ayuntamiento no ha respetado", ha defendido.
"Además de todo lo entregado, la familia fue obligada a pagar la cantidad de 3.083.654 euros, después de las oportunas valoraciones. Dicha cantidad está depositada en el Juzgado Civil y está a disposición de la Fundación desde hace meses", ha asegurado.