Desalojo de estudiantes de ESADE en el Ikibana de Sarrià, Barcelona / MA

Desalojo de estudiantes de ESADE en el Ikibana de Sarrià, Barcelona / MA

El pulso de la ciudad

Una cena de graduación de ESADE acaba con todos desalojados por la policía

La Guardia Urbana levantó acta al restaurante Ikibana Sarrià "por no respetar el aforo y por realizar una actividad diferente a la autorizada"

28 mayo, 2021 22:35

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Una cena de graduación de estudiantes de la prestigiosa universidad ESADE acabó con todos los participantes desalojados por la policía. Los hechos tuvieron lugar este jueves por la noche en el restaurante Ikibana de Sarrià, situado en el número 11 de la calle Dr. Fleming y perteneciente al grupo Carpe Diem.

Según fuentes de la Guardia Urbana de Barcelona, se desalojó un total de 280 personas del establecimiento y se "levantó un acta de inspección al local por no respetar el aforo y por realizar una actividad diferente a la autorizada". No obstante, fuentes del restaurante aseguran que el grupo era de 140 personas, con previa reserva, y que se controló en todo momento el aforo. 

Desalojo de estudiantes de ESADE en el Ikibana de Sarrià, Barcelona / MA

Desalojo de estudiantes de ESADE en el Ikibana de Sarrià, Barcelona / MA



EL IKIBANA SE DEFIENDE

Los jóvenes celebraban el fin de curso en el sótano del coqueto restaurante de Sarrià, un espacio para grupos o eventos privados con 260 metros cuadrados interiores y un aforo de más de 100 comensales. Contactado por este medio, un encargado del Ikibana asegura que la cena se desarrolló con total normalidad, y que los estudiantes se comportaron en todo momento, respetando las medidas de seguridad. El problema vino al final de la cena, cuando varios estudiantes salieron a fumar. Fue entonces cuando los vecinos dieron la voz de alarma a la policía.

Agentes de la Guardia Urbana en el interior de Ikibana Sarrià / MA

Agentes de la Guardia Urbana en el interior de Ikibana Sarrià / MA



Los agentes se personaron en el local, e identificaron a todos los alumnos. Desde el Ikibana admiten que cometieron algún error, pero se muestran sorprendidos por la actuación de la Guardia Urbana. Además, destacan que desde que estalló la pandemia no han tenido ninguna situación similar, dadas las "estrictas medidas de control que aplican".