Hasta siete árboles ha talado este martes el Ayuntamiento de Barcelona en la calle Recesvint de Sant Andreu. Una vía estrecha y de un solo carril de circulación, en la que desde hace meses se ha implantado la recogida puerta a puerta. Con un gran problema, y es que los camiones de la basura no caben. Por este motivo, han denunciado algunos vecinos a Metrópoli, el área de Ecologia Urbana habría encontrado una única solución: cortarlos.
Uno de los árboles talados este martes en Sant Andreu, en el suelo / CEDIDA
"Hay muchas calles estrechas y con adoquines, sobre todo en el casco antiguo, entre Fabra i Puig y Malats. Tanto que, en algunos lugares, los camiones no pasan. Entonces los trabajadores tienen que bajarse e ir andando para recoger las basuras", ha explicado a este diario Anna Satorra, exconsejera de JxCat y miembro de la agrupación del PDeCAT en el barrio.
Antes de la implantación del puerta a puerta, la primavera pasada, los vecinos se desplazaban hasta las calles cercanas más anchas, donde estaban ubicados los contenedores. Pero con el nuevo sistema de recogida no hay containers y tienen que dejar las bolsas de basura delante de sus casas. Luego son los operarios los que van a buscarlas. Por este motivo, cuentan residentes a Metrópoli, esta mañana operarios municipales han serrado los troncos de las siete alteas que dificultaban el paso de los vehículos de la limpieza y se las han llevado en una camioneta.
Dos alcorques (los hoyos en los que se encontraban dos de los árboles) después de la tala / CEDIDA
HUBO OTRA TALA EN VERANO
Una tala que sigue a otra que se hizo este verano a muy poca distancia. En aquel caso fue en la calle Cerdà, cuando se cortaron tres árboles más por unas obras que se estaban realizando en un inmueble. "Hay poco espacio verde, como para que ahora retiren los árboles del casco antiguo. Los vecinos están inquietos porque el Ayuntamiento no para de talar", señala Satorra.
EL AYUNTAMIENTO DEFIENDE QUE "NO ESTABAN EN BUEN ESTADO"
Desde el Ayuntamiento matizan que lo que se hizo, para facilitar el paso de camiones, fue una poda del arbolado de la calle Recesvint. "El objetivo era reducir el ruido y las molestias que pueda ocasionar, del mismo modo que se hace en otros puntos de la ciudad para facilitar la circulación de vehículos pesados como autobuses", explican fuentes municipales a Metrópoli.
En el contexto de estas podas, las bridagas de Parcs i Jardins habrían determinado que "había que retirar tres ejemplares que no estaban en buen estado". Un argumento que no convence a los vecinos, que hablan de cuatro árboles más –siete en total– y que afirman que no es la primera vez que les justifican una tala con el pretexto de la salud del árbol. Aun así, el consistorio insiste y anuncia que colocará unos nuevos: "Se procedió a talarlos por este motivo. En las próximas semanas se programará la retirada del tronco y una replantación".