La conflictiva losa de la ronda de Sant Antoni irá fuera. La teniente de alcaldía de Ecología Urbana y Urbanismo, Janet Sanz, lo ha confirmado este jueves. Las obras de retirada se iniciarán este 2022. JuntsxCat lleva este viernes al pleno una proposición en este sentido que, salvo sorpresa de última hora, se aprobará por unanimidad, incluidos Barcelona en Comú y PSC, los partidos de gobierno.
La presión de los vecinos y comerciantes, que este jueves por la tarde se han manifestado en protesta por la dejadez municipal con la ronda de Sant Antoni, que llevan meses conviviendo con conflictos e incivismo y con la losa convertida en el epicentro del mercado de la miseria desde finales de 2019, así como política y mediática, ha sido decisiva para hacer cambiar de posición al gobierno de Ada Colau.
RECUPERAR EL PROYECTO DE 2018
Ahora la guerra que se avecina en la ronda es otra: ¿Qué proyecto de reurbanización se ejecutará tras quitar la losa? Vecinos y comerciantes, agrupados en la Plataforma d'Afectats per la Llosa de Sant Antoni, lo tienen claro. Quieren recuperar el proyecto de 2018, que fue anulado por el Ayuntamiento mientras se licitaba: algo más de cinco millones de euros [ver aquí].
La propuesta de JuntsxCat pide licitar e iniciar inmediatamente las obras de retirada de la losa, así como su reurbanización, y "que se ponga en marcha un plan de choque social para abordar la problemática de seguridad, venta de drogas e incivismo que sufre el vecindario del entorno, fruto del abandono a la que ha estado sometida". El concejal y portavoz, Jordi Martí Galbis, tiene claro que la reforma que se debe ejecutar es la de 2018, "consensuada con vecinos y comerciantes, para no perder 10 meses más".
UN EJE VERDE, CÍVICO Y CON MOVILIDAD SOSTENIBLE
A grandes rasgos, la reforma propuesta en 2018 pretendía convertir la ronda de San Antoni en un eje más cívico y verde, donde los peatones, las bicicletas y el transporte público ganaran protagonismo. El Ayuntamiento planteaba la reurbanización completa de la ronda, entre la calle del Comte d'Urgell y la plaza de la Universitat. "Siempre bajo los criterios de mejorar el espacio público, introducir un carril bicicleta, más verde y poner a los peatones y la movilidad sostenible en el centro de las prioridades", decía en un nota de prensa el consistorio en noviembre de 2018, y que situaba el nuevo calendario en 2020.
La actuación prevista decía que las obras se ejecutarían en dos fases: la primera, entre Comte d'Urgell y Floridablanca, y la segunda, desde Floridablanca hasta Universitat. "El primer tramo ya cuenta con un proyecto ejecutivo redactado y compartido con el vecindario y comerciantes de la ronda de Sant Antoni", incluía la nota, si bien el gobierno dejaba la puerta abierta a introducir modificaciones.
BASTANTES GRUPOS A FAVOR DE LA REFORMA DE 2018
El PSC, socio de los comunes, es también partidario de recuperar el proyecto de hace cuatro años. Ésa es la idea que defendera Jaume Collboni en el pleno del viernes. ERC también quiere esa remodelación. "Queremos que la ronda sea reurbanizada y dignificada como estaba previsto en 2018", apunta la regidora republicana Eva Baró. Y desde Ciutadans, Mariluz Guilarte, defiende también el proyecto de 2018 pero pide que se ejecute de forma inmediata.
Desde el PP, fuentes del servicio de prensa explican que su petición es que se reurbanice. No piden explícitamente el proyecto de 2018, pero no lo descartan. Y Eva Parera, líder de Valents, considera que la prioridad debe ser que "la arteria reabra al tráfico".
A pesar de que la petición mayoritaria es que la reforma que se haga sea la de 2018, probablemente la última palabra la tendrá el departamento de Ecología Urbana y Urbanismo, que depende de los comunes. Según Sanz, la retirada de la losa se iniciará a finales de año y la idea es que los trabajos de reurbanización sean consecutivos a la eliminación de la losa. Pero su idea es actualizar el proyecto de 2018.
PROYECTO VINCULADO AL RESTO DE RONDAS
Para la teniente de alcaldía, el proyecto de urbanización se tiene que actualizar porque la situación ahora no es la misma que en 2018. La intención de los comunes es también evaluar todas las rondas que unen Ciutat Vella y Eixample -Sanz hace referencia a calles como las rondas de Sant Pere, Universitat, Sant Antoni y Sant Pau- y ver qué movilidad y vínculos tiene que haber en un futuro entre ellas. En la actualización del proyecto de la ronda de Sant Antoni, este aspecto también se tendrá en cuenta.
Fuentes de la plataforma vecinal y comerciantes insisten en el proyecto de 2018. "Es el mejor para la ronda y para el barrio de Sant Antoni". Recuerdan que el proyecto incorporaba un carril bus de subida y de bajada. También incluía un carril de carga y descarga en el lado del Raval, un carril bici bidireccional en el centro y aceras más amplias. "Es un proyecto que se consensuó con todos los vecinos y entidades y con todos los partidos. Nos tocará defenderlo", afirman las fuentes.
Ganada la primera batalla, que comporta el compromiso político de empezar a retirar la losa este año, ahora vecinos y comerciantes se enfrentan a una nueva guerra: el proyecto urbanístico. "Lucharemos por él. Es el más corto, el más rápido de implantar y el más económico".