La aerolínea de low cost Ryanair ha anunciado paros durante varios días en una serie de jornadas de huelga de sus tripulantes de cabina y pasajeros convocadas por los sindicatos USO y Sitcpla.
La convocatoria es para el 30 de junio y el 1 y 2 de julio, coincidiendo con la primera operación salida del verano y tras el fin de semana largo de Sant Joan.
HUELGA DE RYANAIR
Con estas protestas, los sindicatos de la compañía irlandés quieren lograr que la aerolínea retome las negociaciones del primer convenio colectivo.
Con todo, desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) han recordado a los viajeros que pueden sufrir retrasos y cancelaciones en sus vuelos. En este sentido, ¿qué deben hacer aquellos pasajeros afectados?
PASAJEROS AFECTADOS
Si la cancelación se produce para un vuelo programado en un plazo de dos semanas o más, la compañía está obligada a reembolsar el importe del billete. Si la cancelación se produce entre 7 y 14 días antes del vuelo, los pasajeros tendrán derecho a una indemnización automática “si la empresa no ofrece un transporte alternativo que permita salir con no más de dos horas de antelación a la salida prevista y permite llegar al usuario a su destino final con menos de 4 horas de retraso respecto a la hora prevista”.
Finalmente, si la cancelación ocurre con menos de una semana de antelación, el pasajero tiene derecho a una indemnización automática, salvo que ofrezcan una alternativa con no más de una hora de antelación respecto a la hora prevista y con menos de dos horas de retraso de llegar al destino.
COMPENSACIONES ECONÓMICAS
Las compensaciones por cancelaciones varían en función del tipo de vuelo y el destino. Compensación de 250 euros para vuelos de hasta 1.500 kilómetros, que se convierten en 125 euros si te ofrecen viajar con una demora de no más de dos horas, indemnización de 400 euros si se trata de un viaje intra-comunitario de más de 1.500 km, y para los demás vuelos de entre 1.500 y 3.500 km. En cambio, será de 200 euros si te ofrecen una solución para viajar al destino con una demora de no más de 3 horas y compensación de 600 euros en el caso de trayectos de más de 3.500 km, que será de 300 euros si te ofrecen viajar a tu lugar de destino con una demora de no más de 4 horas.