La perrera municipal de Barcelona se quedó pequeña hace mucho tiempo. A pesar que desde el Centro de Acogida de Animales de Compañía (CAACB) desearían que "sobrase espacio para gestionar mejor los cuidados de los animales", trabajadores del centro aseguran a Metrópoli que actualmente están "llenos" y que "queda mucho trabajo por hacer".
Anna Ortonoves, jefa del Departamento de Gestión y Protección de los Animales del CAACB, explica a este digital que, con el paso de los años, los abandonos han disminuido notablemente. De hecho, durante el primer semestre de este 2022 las entradas en el centro se han reducido en un 20% respecto al mismo periodo de 2019. "Todavía no podemos celebrarlo porque siguen llegando perros y gatos abandonados a la perrera prácticamente todos los días", cuenta Ortonoves.
TENDENCIA A LA BAJA DESDE 2016
La tendencia a la baja en los abandonos de mascotas –perros y gatos– se repite desde el 2016. De enero a junio de 2022 entraron en el centro 294 canes, mientras que en el mismo periodo en 2021 fueron 315. Respecto a los felinos, entraron 227 con respecto a los 319 del año pasado.
Desde el CAACB atribuyen el descenso a la mayor "concienciación" de la población con la responsabilidad que implica tener un animal y con la "importancia de adoptar". Además, Ortonoves considera que la aplicación del Decreto Legislativo 2/2008 en Catalunya, en el que "se prohíbe exponer a los animales en los escaparates de las tiendas y obliga a identificar a perros, gatos y hurones", ha potenciado el cambio de rumbo en el maltrato animal.
300 ANIMALES
A pesar de los datos de mejora, actualmente hay unos 300 animales de compañía –200 perros y 100 gatos– en el CAACB, ubicado en la carretera de la Arrabassada de Barcelona. Metrópoli ha visitado las instalaciones, que cuentan con salas de quirófano, de atención médica y con jaulas y gateras para la estancia de las mascotas.
Los perros y gatos están divididos en función de sus necesidades, carácter y estado de salud. "Hay algunos canes que solo pueden estar en contacto con su cuidador porque todavía no están preparados para socializar y pueden generar un peligro para los trabajadores", cuenta Ortonoves. Por ello, asegura que "siempre hacen falta más voluntarios" para dar apoyo–actualmente hay 150– mientras que los 35 trabajadores cualificados del centro "se turnan como pueden para cubrir todas las necesidades".
DIVISIÓN DE TAREAS
Los gatos que necesitan atención especial se encuentran en zonas separadas donde pueden ser "controlados por cuidadores y veterinarios". El resto –con un buen estado de salud y capacidad de socialización– viven en gateras, con zona interior y exterior. En cada uno de los espacios hay unos siete u ocho felinos.
La mayoría de los perros están en jaulas individuales para facilitar el control de los mismos. "Es mucho más sencillo atenderlos así", asegura Ortonoves. Suelen salir a pasear una vez al día, aunque desde el centro afirman que, "si pudiesen, los sacarían mucho más". En el reparto de tareas hay empleados que se encargan de mantener los espacios salubres, otros de repartir los alimentos y, de forma general, los voluntarios –excepto en casos concretos– son los que pasean y garantizan el "tiempo de ocio" de los canes.
95% DE 'PPP'
El 95% de los perros del CAACB se consideran PPP –Perros Potencialmente Peligrosos–. Entre estos canes se incluyen razas como el Pitbull terrier, el American staffordshire terrier, el Rottweiler o el Dogo argentino, entre muchos otros. Según la experta, hay una tasa mayor de abandono en estas razas que se arrastra desde hace décadas.
A pesar de que muchas asociaciones trabajan por eliminar esta distinción porque alegan que "ningún perro nace siendo peligroso", todavía es una realidad y en Barcelona se necesitan unos trámites para su "tenencia y conducción". Ortonoves explica a este digital que la distinción PPP no suele ser un problema para "adoptar". En el centro tramitan la cita con el Ayuntamiento para obtener todos los permisos, para los que se requiere un certificado psicotécnico.
UN 14% VIVE SIEMPRE EN EL CAACB
Según los datos actuales, se calcula que un 14% de los animales que se abandonan viven de manera permanente en los centros de acogida. Tal y como ha podido comprobar este digital, la mayoría de los perros que residen para siempre en el CAACB son mayores o tienen alguna enfermedad crónica.
"En estos casos ayudan mucho las personas que se ofrecen a acoger a las mascotas", cuenta Ortonoves. Las casas de acogida sirven para dar un hogar a las mascotas pero todos sus cuidados –que incluyen los gastos veterinarios– se realizan desde el CAACB.
Para evitar que los animales envejezcan en el centro, desde la perrera se difunde la campaña Adopta a un invisible para que los interesados en la adopción de un perro o gato "vean más allá". De hecho, según Ortonoves, adoptar a una mascota "más mayor" puede ser una ventaja para muchas familias porque ya están educados y "no hay sorpresas en el proceso de adaptación".
TRASLADO DEL CENTRO
Desde el CAACB esperan que la solución a su falta de espacio llegue este 2023. Hace una década que salió el proyecto de construir un nuevo centro en Montcada i Reixach, y, tras años de retraso, este mayo el consistorio se puso "manos a la obra" en el plan.
Durante la comisión de gobierno del pasado 28 de abril, se aprobó el acuerdo que permite a Barcelona de Infraestructuras Municipales (Bimsa), la empresa que hace la mayoría de obras del consistorio, actuar fuera del límite de Barcelona. Así, el consistorio puede actuar en la finca conocida como Torre Doña Juana, con una superficie de más de 90.000 metros cuadrados, junto al cementerio de Collserola.