Estos son los emblemáticos restaurantes de Barcelona que han cerrado sus puertas para siempre
Varios locales muy conocidos de la ciudad han bajado la persiana permanentemente
20 noviembre, 2022 11:55Noticias relacionadas
Los últimos años son muchos los restaurantes de Barcelona que han tenido que cerrar sus puertas para siempre. La capital catalana ha perdido una larga lista de locales que eran emblemáticos. Los motivos por los que han bajado la persiana son diversos, entre ellos el elevado precio del alquiler, inflación, desahucios y coronavirus. Metrópoli ha hecho un recopilación de algunos de los establecimientos más importantes que no reabrirán.
PAPPA SVEN
El último en cerrar ha sido un restaurante único en Barcelona. Se trata del Pappa Sven, situado en el barrio de Sant Antoni. Este local tenía un valor excepcional: era el único sitio de la ciudad especializado en gastronomía sueca. Después de trece años en funcionamiento, Nina Olsson, la propietaria, ha puesto punto final a este proyecto, tal como explicó ella misma en una publicación en redes sociales.
MARC'S ENTREPANS
Hace tres semanas, el bar Marc's Entrepans, del Congrés i els Indians, bajó la persiana después de casi medio siglo. El sector de la hostelería ha sufrido de primera mano las consecuencias de la pandemia y la inflación. No son pocos los locales que han tenido que cerrar. El Marc's Entrepans no ha sido la excepción: después de 47 años en el paseo de Maragall, cerró permanentemente el pasado mes de octubre.
CAN SOTERAS
El restaurante Can Soteras también se vio obligado a cerrar por culpa del coronavirus en 2021. Hacía 105 años que ofrecía gastronomía tradicional en el paseo de Sant Joan. Especializado en caracoles, era uno de los locales más emblemáticos de la ciudad, pero todo se torció por la crisis económica derivada del confinamiento y no tuvieron más remedio que cerrar sus puertas.
GRAN CAFÈ
El Gran Cafè de la calle de Avinyó, en el corazón del Gòtic, tampoco superó la fuerte recesión de la cuarentena. Después de un siglo haciendo historia en este barrio, este local modernista cerró la persiana para siempre. Ya estaban pasando un mal momento antes del confinamiento, pero la situación llegó a su límite en 2020. Los vecinos del Gòtic perdieron un signo de identidad, ya que abrió sus puertas en 1920.
VIENA DE LA RAMBLA
El Viena de la Rambla no era como cualquier otro restaurante de la cadena de comida rápida. Este local modernista tenía la categoría E2, que significa que es un establecimiento de interés por su gran valor decorativo y arquitectónico. Abrió por primera vez en los años 80 y era propiedad de la Reial Acadèmia de Ciències i Arts de Barcelona (RACAB). El Viena de la Rambla reabrió el pasado abril como Barra & Art.
CASA LEOPOLDO
El escritor Vázquez Montalbán visitaba la Casa Leopoldo del Raval con mucha frecuencia. Era uno de los restaurantes más conocidos del barrio que, desde 1929, servía comida tradicional catalana. Era el punto de encuentro de muchos otros autores de gran renombre, como Eduardo Mendoza o Maruja Torres, entre otros. Había conseguido convertirse en uno de los lugares de referencia del barrio, hasta que, en 2019, lo traspasaron. Ahora, en el mismo lugar, que no ha cambiado el nombre, se sirve comida china.
CAN LLUIS
El restaurante Can Lluis era uno de los más conocidos del centro de la capital catalana. Durante 90 años, sirvió comida tradicional a sus clientes. El local se había ganado muy buena fama en el Raval por la excelente calidad de sus platos, pero no podían pagar los 3.000 euros de alquiler que les pedía la propiedad, que los desahució en marzo del 2020, el mismo día que se decretó el estado de alarma. Can Lluís era un local histórico, frecuentado por actores, intelectuales y escritores, como Vázquez Montalbán. El 23 de enero de 1946, una bomba de unos anarquistas explotó en el interior y murieron cuatro personas.
CAL PINXO
El local Cal Pinxo de la Barceloneta bajó su persiana para siempre en 2021, después de 60 años. Como muchos otros restaurantes, no pudo aguantar la delicada situación de la pandemia del coronavirus, a pesar de que no estaban pasando un buen momento. La asociación de vecinos de la Barceloneta explicó la situación en un comunicado, lamentado el cierre de uno de los restaurantes más emblemáticos del barrio.
PITARRA
El Pitarra abrió a finales del siglo XIX. En su interior tenía bienes inmuebles de gran valor patrimonial. Barcelona es ciudad de la literatura por la UNESCO y este restaurante era un claro ejemplo de ello, ya que era la antigua casa del poeta Frederic Soler (Serafí Pitarra). Sus increíbles decorados eran un punto de atracción turística para los amantes de la literatura, pero hace cuatro años, cerró sus puertas para siempre y se convirtió en un pub irlandés que acabó bajando la persiana en menos de tres meses.
CAFÉ SCHILLING
Situado en la calle de Ferran 23, el Café Schilling era uno de los locales de desayunos y tapas más famosos del Gòtic. A diferencia de otros restaurantes, este establecimiento siempre había conseguido mantener la esencia de sus platos. El Café Schilling, que abrió en 1996, no pudo recuperarse de las enormes pérdidas económicas que tuvo por culpa del confinamiento y tuvo que bajar la persiana.
MERCÈ VINS
Mercè Vins, al lado del Palau de la Música Catalana, era un restaurante con más de 38 años de historia. Sus clientes podían disfrutar de una gran variedad de platos, muchos de ellos ecológicos y de tradición catalana a precios asequibles en el centro de Barcelona. Mercè Boada hizo un comunicado en redes sociales explicando todo lo que había luchado para poder mantener abierto el local, pero que, por desgracia, la crisis del coronavirus se lo lleva por delante.
SENYOR PARELLADA
El Senyor Parellada del Born era un restaurante con más de 150 años de historia que bajó la persiana en 2021. Este local ofrecía alta cocina de tradición catalana e, igual que muchos otros establecimientos, sufrió las consecuencias de la pandemia y cerró permanentemente en Barcelona.