El sinhogarsimo en La Ciutadella, en auge: aumentan los campamentos de sintecho en el parque
La presencia de personas sintecho que duermen en uno de los mayores parques de Barcelona se ha incrementado a la vez que la zona sufre de una plaga de ratas
15 abril, 2023 00:00Noticias relacionadas
El Parc de la Ciutadella de Barcelona lleva tiempo ejerciendo como un refugio para los sintecho en la capital catalana. Desde hace años, son muchas las personas sin hogar que aprovechan algunos de los puntos de la gran zona verde ubicada en el barrio de Sant Pere, Santa Caterina i La Ribera para plantar allí sacos e incluso tiendas de campaña y aprovechar que durante la noche el recinto está cerrado para dormir en relativa seguridad.
Dentro de las instalaciones del parque hay lugares que han funcionado como refugios hasta hace relativamente poco e incluso zonas en las que se forman verdaderos campamentos, según explican a Metrópoli deportistas que acuden todas las mañanas a hacer ejercicio. Con la llegada de la primavera y, por ende, el fin de las noches invernales, ha comenzado a intensificarse la presencia de personas sin hogar que pernoctan en el parque.
Pasear por el recinto a primeras horas de la mañana suele dejar una estampa que ejemplifica a la perfección cuáles son las dos caras de la misma moneda que es Barcelona. Por un lado, grupos de persona practicando yoga, estiramientos matutinos u otra clase de ejercicios en grupo mientras, a escasos metros de distancia, otras personas comienzan a recoger los campamentos improvisados aprovechando los primeros rayos de sol.
En concreto, uno de los lugares en los que más personas se concentran suele ser la Glorieta de de la Transexual Sonia y sus alrededores, como en la fuente monumental aledaña. Tal y como puede verse en las imágenes, aproximadamente una decena de personas duermen, algunas a la intemperie o en tiendas de campaña. Una de las personas que ha pernoctado esta pasada noche en La Ciutadella lo ha hecho junto a una mochila de Uber Eats, mostrando de nuevo la cara de la Barcelona más precaria, la de los trabajadores que, a pesar de tener empleo, no pueden procurarse un lugar en el que vivir bajo techo.
La presencia en el interior de la glorieta ha descendido respecto a finales del pasado año, cuando este digital pudo comprobar que se había montado un campamento en su interior con hasta tendederos y otros elementos. No obstante, eso puede explicarse porque se han retirado los carteles laterales que hacían de paredes y paravientos.
La presencia de sintechos no solo se extiende por el parque, sino también por los alrededores, y es que si uno camina por el paseo de Picasso podrá encontrar refugios elaborados a partir de mantas, cartones u otros elementos que, además, están dotados de una sólida estructura. Con todo, el céntrico parque del distrito de Ciutat Vella, uno de los principales pulmones verdes de la capital catalana, continúa siendo el refugio para personas que no disponen de alternativa habitacional.
SUCIEDAD Y PLAGAS
Por otra parte, la suciedad continúa siendo un problema que aqueja una zona ajardinada en la que, a pesar de que cada mañana pasan los servicios de limpieza municipal, tiene recovecos en los que se acumulan los desechos. Si bien las zonas de paso y más accesibles sí están limpias, solo hace falta alejarse unos metros para encontrar gran cantidad de latas, papeles, bolsas e incluso compresas tiradas por el suelo.
Este medio ha podido comprobar como técnicos de limpieza que trabajaban en el parque han estacionado al lado de una zona en la que se acumula la suciedad, pero han pasado de largo y han dejado como estaba la zona. A juzgar por el aspecto de los mismos, cabe teorizar que llevaban varios días ahí. Más preocupante es el caso de la basura que se acumula en los alrededores de la fuente de la plaza de Sonia Rescalvo. La zona de paso está limpia, pero el césped de los alrededores y la zona con vegetación integrada en la propia estructura monumental está llena de deshechos viejos. El estanque de la fuente es hogar de una bandada de patos, que conviven con dicha suciedad en su propio hábitat.
Allá donde se acumula la suciedad, aparecen las ratas. El parque de la Ciutadella sufre actualmente una plaga de roedores que el gobierno municipal intenta erradicar. Actualmente, ya se han iniciado los trabajos de saneamiento del área.
TRABAJOS EN EL PARQUE
Actualmente, el consistorio trabaja en la rehabilitación del Invernadero, un proyecto para abrirlo de nuevo a la ciudadanía tras 16 años de abandono por parte de la administración pública. El verano de 2020, sin embargo, las instalaciones eran un hogar para siete personas inmigrantes de nacionalidad marroquí, algunas de las cuales habían llegado a Catalunya como menores no acompañados y que, tras alcanzar la mayoría de edad, el sistema "les pegó la patada" y tuvieron que acostumbrarse a vivir entre vidrieras rotas, el rovín de las vallas y los agujeros en paredes y suelo, según denunciaban.
El nuevo Invernadero, junto a otros edificios patrimoniales que datan de finales del siglo XIX o principios del XX volverán a brillar con esplendor y los ciudadanos de Barcelona, así como los siete millones de visitantes que pasan al año por las 17 hectáreas del recinto podrán hacer uso de estos espacios, pero no son las únicas obras previstas. Y es que hace algo más de dos semanas se aprobó el nuevo Plan Director del parque, que sustituirá el vigente de 2003. Se trata de un programa que prevé más de 50 actuaciones que buscan mejorar la conectividad del espacio y vincularlo a la ciencia. Todo ello con el objetivo de convertir la Ciutadella en un parque urbano del siglo XXI.
Entre las actuaciones más destacadas, se construirán dos puentes para garantizar una conexión directa entre el parque y el barrio marítimo de La Barceloneta. El primer puente llegaría a la Barceloneta, mientras que el segundo conectaría el ámbito de la Ciutadella del Coneixement y la UPF con el Parc de Recerca Biomèdica, el Hospital del Mar y la Vila Olímpica. También se abrirán nuevos accesos alrededor del recinto vallado.
Cabe preguntarse qué ocurrirá con las personas que viven en el parque una vez comiencen los trabajos o cuando estos terminen y dejen una nueva Ciutadella más abierta y moderna, lista para esponjar los millones de turistas que la visitan año tras año. Por el momento, la Ciutadella continúa ofreciendo dos caras. Durante el día, ejerce como pulmón verde por excelencia del distrito de Ciutat Vella, sede del Parlament de Catalunya y gran reclamo turístico. Por las noches, no obstante, se convierte en el refugio de decenas de personas que no tienen otro lugar al que acudir en una ciudad en la que iban a crearse 8.000 viviendas sociales, según prometió la actual alcaldesa, Ada Colau.
Preguntados por este digital, el Ayuntamiento aseguran que "hace seguimiento de todas las dinámicas que se dan en la ciudad, también de las que a priori son más excluyentes e invisibles. Dentro de su marco, se atiende a todo el mundo que forma parte de la ciudad, independientemente de su origen".