Escalinata de entrada al Park Güell de Barcelona
El Park Güell recibe la mitad de visitantes que en prepandemia y cierra 2023 con 4,4 millones
En 2019 accedieron al recinto barcelonés nueve millones de turistas
3 febrero, 2024 09:06Noticias relacionadas
El Park Güell despidió 2023 con 4,4 millones de visitantes, cifra menor que en 2019 --antes del covid--, cuando visitaron el parque nueve millones de personas. Así lo reflejan los últimos datos aportados por Barcelona Serveis Municipals (B:SM), quien gestiona el Park Güell.
UN 6% MÁS QUE EN 2022
En comparación con el 2022, el Park Güell de Barcelona ha protagonizado una ligera recuperación del 6%, con 200.000 visitantes más. La mayoría de ellos son de origen extranjero, de entre 25 y 34 años. Según ha detallado B:SM, una cuarta parte visita el parque porque lo considera un “espacio emblemático de Barcelona”, mientras que un 22% lo hace para descubrir la arquitectura de Antoni Gaudí.
ACCESO REGULADO
Desde octubre de 2013, el Ayuntamiento de Barcelona inició un plan de regulación del Park Güell con el objetivo prioritario de preservar este espacio emblemático de la ciudad y mantenerlo en el mejor estado de conservación posible. El parque y todo su entorno sufren, desde hace años, una alta masificación turística que comporta numerosas molestias para los vecinos del barrio, así como una degradación de este patrimonio arquitectónico, único en el mundo.
Turistas en el Park Güell de Barcelona
Para evitar que esta situación empeore, desde hace más de diez años se regula la entrada de visitantes al recinto, con un número máximo de 1.400 a la hora. Un aforo que se traduce en una capacidad anual de 4,5 millones de turistas. Pese a esta limitación, el aforo máximo sigue sin completarse, con 4,4 millones este 2024.
PATRIMONIO MUNDIAL
Declarado Patrimonio Mundial por la Unesco en 1984, el Park Güell es una de las obras de Gaudí más visitadas de la ciudad. Es un reflejo de la plenitud artística del artista catalán: pertenece a su etapa naturalista (primera década del siglo XX), período en que el arquitecto perfeccionó su estilo personal, a través de la inspiración en las formas orgánicas de la naturaleza.
Desde 2013, B:SM regula el acceso por encargo del Ayuntamiento de Barcelona con el objetivo de preservar y velar por el correcto mantenimiento de este espacio.
