Barcelona se libra 'in extremis' de una oleada de huelgas en sus servicios cruciales durante la Navidad
- La capital catalana esquiva varios parones con consecuencias preocupantes en la movilidad y la limpieza
- Este es el día con huelga de autobuses en Barcelona que queda este diciembre: afectaciones y servicios mínimos
Barcelona entra en las Navidades con un ecosistema laboral pantanoso. Durante las últimas semanas, son varios los conflictos laborales que han escalado a huelgas, inicialmente planteadas para este periodo vacacional. Si bien algunas se han mantenido, otras se han desconvocado 'in extremis', ya sea por acuerdos entre sindicato y patronal o por haber perdido fuelle.
Hasta hace escasos días, la capital catalana se encontraba ante una falta de seguridad en el transporte público, huelgas en varios transportes públicos y un parón de la limpieza pensado para la Navidad.
Limpieza
Convocada en solitario por UGT, no ha sido hasta el mismo día en el que se iba a convocar que se acordó una subida del 3% de los salarios correspondiente al año 2023.
Estaban llamados los 4.500 trabajadores del sector, que se distribuyen en cuatro empresas adjudicatarias. El Ayuntamiento de Barcelona recordó la dotación de 168 millones extra para actualizar los salarios. UGT, en declaraciones a Metrópoli, ha asegurado que, una vez atado el año 2023, se seguirán negociando otros años.
"El acuerdo nos abre varias vías nuevas para explorar la relación entre sindicatos, empresas y Ayuntamiento de Barcelona", reflexionan. Al mismo tiempo, "celebran no haber tenido que recurrir al parón, pues el primero que sufre las consecuencias es el mismo trabajador, que no cobra los días no trabajados".
Autobuses
La huelga de autobuses ha encontrado a finales de diciembre su final tras un goteo de bajas entre los mismos sindicatos. Lo que arrancó en octubre como un parón unitario ha ido, poco a poco perdiendo fuelle hasta el punto en el que solo quedaba, a inicios de diciembre, CCOO. Tras haber anulado los paros de los días 5 y 9, se ha añadido finalmente el día 23, por lo que no habrá huelga indefinida.
En este sentido, UGT y el Sindicato Libre de Transporte (SLT) firmaron sendos acuerdos con las patronales Confebus y Atuc por la que se aceptaba la aplicación de coeficientes reductores. CGT, por su parte, abandonó también la convocatoria.
Metro
La que sí se mantiene desde hace años es la huelga de vigilantes en el metro. Los sindicatos UGT, CCOO, USOC, ADN, SSP, SPS y SUVA y Alternativa Sindical han convocado una manifestación de vigilantes de seguridad privada, lo que afecta de lleno a la seguridad en el transporte público barcelonés.
En este caso no se ha convocado un parón para la ocasión, porque ya hay uno, indefinido, desde enero de 2020. Así, cualquier vigilante puede adherirse a la misma. Ante esta situación, ADN Sindical, seguridad y Servicios de Catalunya, advierte que durante las Navidades habrá muchos descubiertos en las patrullas del suburbano barcelonés.
Tren
El sector de la Alta Velocidad también se ha librado en el último momento. Y es que CGT convocó una huelga en Iryo. Los trabajadores reclamaban el pago de las nocturnidades y las dietas. El plan era hacer parones los días 23, 24, 25, 30 y 31 de diciembre y 1 de enero, seis jornadas que golpearían de lleno la movilidad entre Barcelona-Zaragoza y Madrid, la principal ruta de la operadora ferroviaria italo-española.
No obstante, a escasos días del parón, CGT ha desconvocado la movilización después de que otras formaciones sindicales alcanzaran un acuerdo por el que se subían los complementos de nocturnidad y las dietas de los trabajadores en 2,7 euros por hora y 12 euros por jornada, respectivamente --cifras inferiores a las de las reclamaciones elaboradas por los anarcosindicalistas--.
Correos mantiene el parón
La que sí se mantiene por el momento es la huelga de Correos en Barcelona, en un golpe directo al envío de cartas y paquetería.
Encabezados por los anarcosindicalistas de CGT, denuncian la sobrecarga laboral iniciada por la campaña del Black Friday, que se extiende hasta pasada la Navidad. Una situación en la que la compañía privatizada opta por reforzar en envío de paquetes frente al correo ordinario.
Como consecuencia, la plantilla arrancó el parón el pasado lunes, 16 de diciembre y se extenderá por casi un mes hasta el 10 de enero. Durante este tiempo, CGT advierte que se producirán retrasos en la entrega de cartas, entre las que se pueden encontrar "notificaciones de carácter médico, carnets de conducir, multas, resoluciones de ayudas a la dependencia y otras comunicaciones de las administraciones".
La sanidad, pendiente de un hilo
El sector de la salud podría verse comprometido entre el periodo vacacional y enero, pues la organización sindical FTPS ha puesto en guardia a los Técnicos Superiores Sanitarios (TSS) y los Técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE).
El jueves, 12 de diciembre, decenas de coches protagonizaron una marcha lenta por la Ronda de Dalt ralentizando el tráfico a modo de protesta. Y avisan: si no se llega un acuerdo por las mejoras de sus condiciones laborales --ya pactadas a inicios de año a través de un acuerdo que sirvió para desconvocar otra huelga--, harán un llamamiento a todos los trabajadores, tanto del Institut Català de la Salut (ICS) como del Catsalut.
Si bien todavía no hay una fecha exacta de convocatoria, se espera que la huelga, de producirse, llegue en enero. De hacerlo, podría implicar graves retrasos en los servicios de urgencias de hospitales y CAPs de la ciudad, pero también en la producción de pruebas diagnósticas.