Los vecinos del Gòtic cuelgan pancartas para denunciar la inseguridad, el incivismo y la suciedad
Los vecinos de El Gòtic impulsan una campaña contra la inseguridad y la suciedad
Los residentes de El Gòtic han colgado pancartas en sus balcones para denunciar el incivismo en la zona
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Los vecinos de El Gòtic se unen para trasladar un mensaje simple, pero fuerte: "Basta de inseguridad, de incivismo y de suciedad".
La Red Vecinal del Gòtic y el Col·lectiu Gòtic Nord han impulsado una campaña para visibilizar el hartazgo vecinal en la zona con lemas como "basta de robos", "basta de agresiones" y "aquí vivimos con miedo".
Por el momento, los residentes de las calles de Santa Anna, Francesc Pujols, Duc, Canuda, Bot y la plaza Vila de Madrid han colgado las primeras pancartas del movimiento.
Foco de incivismo
Carles y Miquel, dos vecinos e integrantes de ambas asociaciones, explicaron a Metrópoli la degradación "total y absoluta" de la zona norte del Gòtic tras la pandemia.
El foco de incivismo se concentra en el entorno de la plaza de la Vila de Madrid, entre el Portal de l’Àngel y las Ramblas.
Una pancarta colgada en un balcón de El Gòtic para denunciar el incivismo
Según describieron los vecinos, cada día aparecen restos de comida, plástico, botellas de alcohol o incluso jeringuillas en los jardines de esta popular plaza, un enclave que se diseñó para dignificar las tumbas del siglo I ubicadas en la Via Sepulcral Romana y que forman parte del MUHBA.
Además, algunos de los usuarios o exusuarios del Hospital de Campanya Santa Anna, situado una calle por encima, acostumbran a pernoctar por la plaza o en sus alrededores.
“Una parte de estas personas mantiene comportamientos totalmente incívicos y generan conflictos. Logramos que los Mossos d’Esquadra reforzaran la vigilancia, pero ha habido muchos enfrentamientos e incluso apuñalamientos”, alertaron los vecinos.
Un colchón frente al Decathlón de la plaza de la Vila de Madrid en Barcelona
Narcolocales
Asimismo, los residentes avisaron de la proliferación de narcolocales que generan inseguridad tanto para quienes viven cerca como para los negocios.
“Los negocios tienen que lidiar con agresiones, amenazas, escupitajos con sangre provocados por el consumo de drogas, insultos… Hasta hay trabajadores que han tenido que coger la baja”, relataron.
Una pancarta colgada en un balcón de El Gòtic para denunciar el incivismo
Expulsados del barrio
Todo ello ha provocado que algunos de los vecinos de toda la vida se hayan tenido que mudar a otros barrios de la ciudad o incluso fuera en busca de calma y confort, pues algunas personas mayores, especialmente vulnerables, tienen "miedo" de salir a la calle a ciertas horas.
Lo mismo les ocurre a los comercios, que han llegado a abrir 'a la carta', únicamente cuando algún cliente avisaba de que pasaría, para evitar robos.
