Vallcarca i els Penitents es uno de los barrios de Barcelona (o quizá, el que más) donde el movimiento okupa tiene más presencia. Orgullo para unos, pesadilla para otros muchos vecinos, que sufren un "calvario" al tener que convivir con este colectivo. El mayor incordio vecinal son las raves ilegales que organizan hasta altas horas de la madrugada, interfiriendo en el descanso de los afectados. Muchas de estas fiestas se organizan en los múltiples solares vacíos que existen en el centro del barrio, alejado de la tranquila zona del Penitents, ajena a esta problemática.
Según explican fuentes vecinales a Metrópoli, los dos sitios donde se celebran más raves son unos terrenos ubicados en la calle de Gustavo Adolfo Bécquer 12 y la de Farigola 27. No es algo nuevo. Es un fenómeno que se arrastra desde hace años en este barrio del distrito de Gràcia.
UNA CONSTRUCCIÓN QUE NO AVANZA
"A menudo se organizan raves hasta las tantas y con la música a toda potencia sin tener en cuenta al vecindario. Esta es la consecuencia de tener un barrio lleno de solares", dice otro de los afectados.
Los vecinos creen que el conflicto radica en que hay muchos solares vacíos, donde la construcción de viviendas no avanza. Según explica el Ayuntamiento de Barcelona, los problemas urbanísticos se arrastran desde los años cincuenta, con varios planos que nunca han acabado de arrancar. "El barrio ha sufrido a lo largo de los años una degradación que ahora se quiere paliar con una nueva modificación del Plan General Metropolitano (MPGM), que interfiere en el entorno de las calles de la Farigola, Cambrils, Calendau y Gustavo Adolfo Bécquer y la avenida y el viaducto de Vallcarca, con 15.443 metros cuadrados de superficie", dice el consistorio municipal en su página web.
No obstante, los vecinos creen que el MPGM no se está ejecutando con la celeridad que requiere. Mientras tanto, las fiestas en los solares prosigue, a menudo rodeadas de chabolas, como es el caso de la calle de Gustavo Adolfo Bécquer. Los residentes del barrio se avisan entre ellos, ya que las okupaciones de estos terrenos está a la orden del día.
FUERTE PRESENCIA DEL MOVIMIENTO OKUPA
"Nosotros lo que denunciamos son los asentamientos en la plaza del metro y los problemas de salubridad que comportan, a parte de las fiestas en los solares vacíos", dicen las fuentes consultadas por este digital. La fuerte presencia del movimiento okupa hace años que choca con una parte del vecindario. Según explican varios residentes a Metrópoli, los anarquistas "creen que el barrio es suyo" y que tienen legitimidad para hacer y deshacer a su antojo, sin tener en cuenta las normas de convivencia y civismo del distrito.
Estos se concentran en la avenida de Vallcarca, en la calle de la Farigola y en la de la Argentera. La gran mayoría de ellos no son personas en situación vulnerable, sino jóvenes que han convertido la okupación su manera de vivir, lo que incluye las raves ilegales que tantos problemas generan a los vecinos del distrito.
EL AYUNTAMIENTO NIEGA EL PROBLEMA
A pesar de que las fuentes consultadas por este medio reiteran que las fiestas en los solares son algo habitual en Vallcarca i els Penitents, desde el Ayuntamiento de Barcelona aseguran que no tienen constancia de que se hayan hecho raves no autorizadas en la zona ni que se haya producido un aumento de quejas por este motivo.
Lo cierto es que, desde hace meses, varios usuarios comparten vídeos y fotos de esta realidad en redes sociales. "Este es el día a día en Vallcarca, desde hace un lustro. En este asentamiento se acumulan todo tipo de residuos, ruidos, olores, humos, fuegos, insalubridad… Alterando la convivencia de fincas colindantes. ¡Y nadie hace nada!!", decía a finales de mayo un usuario indignado en X (Twitter). "Gentrificación es que haya vecinos que acaben marchando por no tener que sufrir ese incivismo e insalubridad en el barrio", remacha otro vecino en la misma red social.