La alcaldesa de L'Hospitalet, Núria Marín, ha remodelado su gobierno municipal tras el caso de presuntas irregularidades del Consell Esportiu del municipio.
El caso tiene su origen en la denuncia del concejal socialista Jaume Graells –que dimitió como teniente de alcalde, pero no ha dejado su acta ni el grupo municipal–, contra dos compañeros de gobierno, que fueron detenidos y quedaron en libertad con cargos el pasado 10 de junio: Cristian Alcázar, que se mantiene como segundo teniente de alcalde, y Cristóbal Plaza, que dimitió de su cargo al frente de la concejalía de Deportes.
NUEVOS CONCEJALES DE JUVENTUD Y ADJUNTA DE DEPORTES
Así, los ámbitos de gestión de la tenencia de alcaldía de Graells quedarán repartidos entre el Área de Planificación, Proyectos Estratégicos y Hacienda, liderada por Fran Belver, que asumirá las competencias de Juventud y Deportes, y el Área de Innovación y Cultura, encabezada por David Quirós, integrará la de Educación.
Marín ha nombrado a Laura García Manota como concejala de gobierno de Juventud, actualmente tenía el mismo cargo en grado de concejala adjunta, y a Maria Teresa Revilla, que era concejala adjunta del Área de Espacio Público, Vivienda, Urbanismo y Sostenibilidad, como nueva concejala adjunta de Deportes.
INVESTIGACIÓN
Aunque Plaza dimitió como edil de Deportes sigue como concejal del Distrito VI de Bellvitge y Gornal.
El juzgado de instrucción número 2 de L'Hospitalet investiga si el Consell Esportiu –entidad privada dedicada a la promoción del deporte escolar, cuya comisión directiva está formada por seis personas designadas por el consistorio– destinó a fines particulares algunas de las ayudas públicas que gestiona, y justificó las subvenciones concedidas mediante documentación falsa.