Badalona estudiará la posibilidad de que para circular por la ciudad se tenga que pagar un peaje de cuatro euros diarios. Así lo comunicó el pasado 30 de mayo la regidora de movilidad, Anna Maria Lara, de ERC, en unas declaraciones a Badalona Comunicació.

La propuesta venía del regidor de Junts per Catalunya, David Torrents, que en la tertulia del Badalona Matí proponía que el peaje urbano que se quiere instaurar en el acceso a Barcelona se colocase en Badalona para "evitar el colapso de la ciudad".

Vista general de la C-31, a la altura de Badalona, con el coche atrapado entre los muros de hormigón / TRÀNSIT

"HAY OTRAS VÍAS"

En la misma cadena, el regidor del PP, Juan Fernández, se oponía a la idea: "Hay otras vías para conseguir una ciudad sostenible que no sea hacer pagar un peaje, precisamente ahora que se han erradicado", razonaba el presidente del PP en el Ayuntamiento de Badalona.

Añadir carriles bici, fomentar y mejorar la red del transporte público y otorgar subvenciones para poder acceder a un vehículo eléctrico son algunas de las alternativas que Fernández traslada desde el grupo municipal. "La propuesta del peaje me parece de una ambición recaudatoria", sentenciaba el popular.

UN "DISPARATE"

El ex alcalde Xavier García Albiol, siguiendo la línea de su equipo, califica la propuesta de "disparate": "El Ayuntamiento está en manos de unos políticos instalados en el disparate que solo piensan en perjudicar al conjunto de los vecinos con medidas como esta".

Albiol ha asegurado que "no es la primera vez que el gobierno municipal anuncia una medida del todo innecesaria que lo único que hace es castigar a los vecinos que tienen coche particular". 

El exalcalde de Badalona, Xavier García Albiol / EUROPA PRESS

COMPRA DE CÁMARAS PARA LA ZBE

Una polémica similar se originó hace unas semanas con la compra por parte del Ayuntamiento de Badalona de 28 cámaras de control de coches. La adquisición tuvo lugar el mismo día que el TSJC anunciaba la anulación de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de Barcelona.

El anuncio suscitó la indignación de la ciudadanía y de los políticos, por lo que la regidora rápidamente salió al paso para aclarar que la compra de las cámaras no significaba que la ZBE "se ponga en funcionamiento rápidamente". Anna Maria Lara insistió en que la puesta en marcha debía ir acompañada de una campaña de "información, de sensibilización y de pegagogía".

Por otra parte, desde el consistorio se trasladó la comprensión de que la ciudadanía estuviese "preocupada", pero lo ven como una oportunidad para "unir esfuerzos con las administraciones".

Cámara con lector de matrículas para el control de la ZBE / METRÓPOLI

COLAU, A FAVOR DEL PEAJE

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, se mostraba hace días a favor de la propuesta de las entidades ecologistas y de promoción del transporte público. Colau se ha manifestado a favor de estudiar la implantación de este peaje de acceso a la ciudad y de establecer un límite diario de llegada de cruceros.

El peaje urbano iría destinado tanto a los residentes como a los de fuera de Barcelona y el objetivo de las organizaciones es combatir la emergencia climática, la contaminación de la ciudad y promover el transporte público.

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