Los 'Pelúos' de Sant Roc, de luto por el asesinato de un miembro de su clan

En el barrio de Sant Roc de Badalona reina una aparente tranquilidad después del asesinato cometido en el interior de un domicilio la noche del pasado domingo, 23 de octubre. Un hombre magrebí de 35 años mató a golpes a otro hombre de 49, de etnia gitana y miembro del clan de los 'Pelúos'.

La mañana de este martes, 25 de octubre, nada quedaba de las numerosas dotaciones de Mossos d'Esquadra que inundaron el barrio el pasado lunes. La zona donde se había perpetrado el crimen, la calle Còrdova, estaba especialmente vigilada por un tiroteo que se produjo ayer sobre las 10:00 horas. Sin embargo, si bien la presencia policial es escasa 48 horas después del suceso, la Plaza Roja de Sant Roc lleva estos días dominada por una gran multitud de personas, todas gitanas, reunidas para comentar, según explican los vecinos, el siguiente paso.

Varios furgones de Mossos y decenas de agentes desplegados en Sant Roc / ÁNGELA VÁZQUEZ

MISA Y FUNERAL

Fuentes policiales explicaban este lunes a Metrópoli que esperaban una noche "complicada" en cuanto a altercados o posibles venganzas. El tiroteo que se produjo unas horas después del crimen fue la primera muestra de ello. Sin embargo, por la tarde, el ambiente en el barrio estaba muy tranquilo y la noche se ha desarrollado sin ningún incidente destacado.

Uno de los motivos que explicaría este reposo es que el clan de los 'Pelúos' ha velado el cuerpo de Pablo, el fallecido. El Tanatori del Litoral, ubicado en Sant Adrià de Besòs, ha acogido el cadáver del miembro de la familia. Al ser un local 24 horas, familiares y conocidos habrían pasado allí gran parte del día y toda la noche. Según fuentes cercanas al caso, el entierro del 'Pelúo' se celebrará este martes en el cementerio de Pomar, en Badalona.

Tanatorio del Litoral en Sant Adrià de Besòs / TANATORI DEL LITORAL

MOVIMIENTOS

Las mismas fuentes policiales han comentado a este digital que los problemas "suelen venir después del entierro", una vez la familia ya ha dejado en reposo el cuerpo del fallecido. "Será una semana larga", lamentan.

Por otra parte, Metrópoli ha podido saber que uno de los patriarcas de la familia se habría desplazado hasta Badalona desde Andalucía para tratar el asunto, aunque esta teoría no está confirmada.

La calle de Còrdova, en Sant Roc / ÁNGELA VÁZQUEZ

SIN TEMOR A GUERRA ENTRE FAMILIAS

El miedo a las represalias es creciente, pero la policía está "tranquila" porque este crimen no es el origen de una nueva guerra entre familias gitanas. En el caso de las últimas reyertas importantes en el barrio de La Mina, decenas de familiares tuvieron que marchar y mudarse a otras ciudades, por el temor a venganzas.

El asesino de Pablo, que fue detenido momentos después, vivía con su mujer y sus dos hijos, que se encontraban en el piso en el momento del crimen. Según ha podido saber este medio, cuando Pablo llegó al domicilio para tratar un problema con la compraventa de un coche, la esposa y los niños se escondieron debajo de la cama y llamaron al 112. El hombre magrebí ya tenía diversos antecedentes.

El número 96 de la calle Còrdova de Sant Roc / ÁNGELA VÁZQUEZ

"CAZA"

Una de las expresiones más utilizadas estos días por Sant Roc es el de la "caza" que aparentemente los familiares y conocidos del fallecido comenzarán esta semana para clamar por el asesinato de Pablo.

Dos dotaciones de la Guardia Urbana se encontraban este martes por la zona, aunque su presencia poco tiene que ver con el crimen. Esta se debe, más bien, al mercadillo que cada semana se monta debajo de la autopista, a caballo entre Badalona y Sant Adrià.