Alumnos en una escuela de Barcelona / AJ BCN

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Gran Barcelona

Un colegio de Sant Joan Despí indemnizará a un alumno y a su madre por el acoso escolar sufrido

La condena obliga a la escuela Ateneu Instructiu a pagar 6.500 euros al estudiante y 650 a su progenitora por normalizar la violencia desde 2015 hasta 2017

5 diciembre, 2023 17:32
Carlotta Zamoro

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La escuela Ateneu Instructiu de Sant Joan Despí deberá pagar 6.500 euros a un alumno por los perjuicios derivados del acoso escolar que sufrió. La condena también determina que el centro tendrá que indemnizar con 650 euros a su madre por la situación de "zozobra, angustia y ansiedad" que le provocó. 

El fallo, al que ha tenido acceso Efe, es "novedoso al considerar el impacto en la progenitora", lo que muestra una "mayor sensibilización" frente al acoso escolar, ha afirmado la letrada encargada del caso, Noelia Lidunia.

Según la sentencia, que ha emitido el juzgado de primera instancia e instrucción número 5 de Sant Feliu de Llobregat, los padres notaron desde finales de junio de 2015, al acabar el último curso de educación infantil, un cambio repentino en la conducta de su hijo.

BURLAS Y ACOSO

El niño expresaba que no quería leer debido a las burlas y el acoso por parte de sus compañeros. Aunque al principio no se le dio mucha importancia, al persistir la situación, se decidió iniciar un seguimiento psicológico.

La familia comunicó la situación a la dirección del centro y a la tutora, quienes acordaron aplicar medidas correctivas, aunque los padres señalan que no recibieron información concreta sobre estas medidas. El acoso continuó hasta el final del curso 2016-17, mientras el niño cursaba segundo de primaria.

La escuela Ateneu Instructiu de Sant Joan Despí

La escuela Ateneu Instructiu de Sant Joan Despí Google Maps

VIOLENCIA

La abogada comentó que la escuela, al no actuar de inmediato, normalizó la violencia hasta 2017, y la sentencia resalta que los protocolos ineficaces si no se aplican de forma inmediata y adecuada.

Según la sentencia, la familia también reportó que los compañeros acosaban al niño, llamándolo "chupacabras" y golpeándolo en el patio, llegando incluso a partirle el labio en una ocasión, incidentes que fueron comunicados al centro.