El 'modelo' de Parlon en Santa Coloma eleva a la alcaldesa a ser el rostro público del PSC

Núria Parlon acumula años de gestión con un modelo que la ha diferenciado de otros alcaldes y alcaldesas metropolitanas. Tras conseguir una mayoría absoluta en las últimas elecciones, que le permite continuar al frente de la ciudad que lleva 15 años liderando, Santa Coloma de Gramenet, Parlon también ostenta otra gran responsabilidad desde este pasado domingo: ser la cara visible del PSC en Catalunya. ¿Por qué? ¿Qué representa la edil de una de las ciudades más complejas de Catalunya?

El PSC lo decidió en su XV Congreso, celebrado el pasado fin de semana. Parlon formará parte del núcleo duro en la ejecutiva del partido que lidera Salvador Illa, primer secretario de los socialistas catalanes y candidato a la presidencia de la Generalitat. La alcaldesa de Santa Coloma es ya nueva portavoz del PSC y secretaria de seguridad y convivencia. El cargo la llevará a comparecer cada lunes ante los medios de comunicación tras las reuniones de la Ejecutiva del partido para dar voz al proyecto de los socialistas, que tienen un primer reto el 12 de mayo: las elecciones al Parlament de Catalunya.

Núria Parlon, alcaldesa de Santa Coloma de Gramanet, en su despacho LENA PRIETO

Poder desde el 2009

Núria Parlon es una de las figuras socialistas fundamentales en el Barcelonès Nord. El bastión socialista del Besòs es testigo desde hace años de las políticas concretas de Parlon, que comenzó a hacerse conocida en 2009, cuando tuvo que sustituir en la alcaldía el encausado por el caso Pretoria, Bartomeu Muñoz. La corrupción que envolvió Santa Coloma entonces no logró debilitar al PSC: en las elecciones municipales del 2011, con 12 concejales, Parlon se quedó tan solo a un concejal de conseguir la mayoría absoluta. Una remontada que fue solo el inicio de su éxito en la novena ciudad de Catalunya en términos de población.

Sin embargo, no todo fue un camino de rosas. En 2014 rozó el cargo de primera secretaria del PSC cuando Pere Navarro dimitió, pero renunció a última hora. En el último segundo consideró que no le había llegado el momento, que el partido arrastraba demasiadas contradicciones y que su propio perfil, entonces, no iba a ser entendido y que debía concentrar sus esfuerzos en Santa Coloma. Miquel Iceta dio un paso al frente y se hizo con la primera secretaría. El mismo Iceta ganó en las primarias en 2016, con un 54% de los votos, frente, esta vez sí, Núria Parlon. Un año después, en el 2017, Parlon renunció a su cargo en la Ejecutiva Federal del PSOE como Secretaria de Cohesión e Integración por la aplicación en Catalunya del artículo 155. Eran otros tiempos, y la dirigente socialista entendía que en Catalunya se debía celebrar un referéndum, aunque ella no fuera independentista. El control del autogobierno, por parte del Gobierno del PP de Mariano Rajoy, a través de ese mecanismo constitucional, llevó a Parlon a tomar esa decisión.

Rechazo "frontal"

La alcaldesa criticó entonces la intervención del 155. En un comunicado emitido por Parlon y los alcaldes de Terrassa, Granollers y Castellar del Vallès se pedía que el PSC se opusiera "frontalmente a la medida" y no validase, "en ningún caso, su puesta en marcha". "El proyecto de los socialistas catalanes se fundamenta en el ejercicio y constante fortalecimiento del autogobierno de Catalunya. La aplicación del 155 supone, de hecho, la suspensión de la autonomía de la Generalitat y del Parlament, con consecuencias irreparables", aseguraba la nota, que insistía en el "más radical desacuerdo y rechazo" a la intervención de la comunidad.

Esa posición dotó a Parlon de un perfil soberanista, pero que no resquebrajó su liderazgo en el área metropolitana. Tampoco la confianza del partido en ella, tal y como ha demostrado ahora Salvador Illa, el candidato a la Generalitat, seleccionándola como portavoz.

Núria Parlon y Miquel Iceta se abrazan tras las primarias que los enfrentaron / EFE

La seguridad, una de las claves

La clave es la gestión. Parlon decidió concentrarse en su ciudad y buscó fórmulas distintas, siempre a través del consenso, para paliar o combatir determinados fenómenos, en especial la inseguridad. Se trata de una de las piedras angulares del mandato de Parlon. La alcaldesa supo ver que su relación con la Policía Local debía cambiar: los agentes exigían ya en 2018 un incremento de la plantilla y la situación entre la dirigente y los profesionales era tensa. Con los años, los problemas se han solventado hasta el punto de que hoy, el cuerpo local de policía de Santa Coloma es un modelo a seguir para el resto de alcaldes y alcaldesas. En comentarios con sus interlocutores, los responsables del área en L'Hospitalet, en Badalona --con alcalde del PP--, en Sant Adrià o en municipios del Baix Llobregat, se nombra con frecuencia a Parlon: "Ha generado un cambio de óptica, es una referencia". 

Con ello, se hace referencia a una cuestión de fondo. Núria Parlon entiende que los partidos de izquierda no pueden dejar la cuestión de la seguridad a la derecha, como si fuera algo propio. Al revés. La alcaldesa entiende que son los ciudadanos con menos recursos, los barrios con menos medios, los que merecen una vigilancia mayor en las calles. La seguridad de los ciudadanos es de "izquierdas", según su lógica. Los alcaldes metropolitanos han tomado nota, y hablan ya sin tapujos sobre mediadas que pueden ser consideradas coercitivas, pero que son necesarias. 

Parlon ha contado para atender esa demanda mayor de seguridad con una unidad especializada como la Unitat de Suporti i Intervenció Ràpida (USIR), mejoras en las condiciones laborales e inversión en los materiales. Con todo ello la delincuencia también se ha visto reducida año tras año en la ciudad. Un ejemplo de gestión que tiene a su policía contenta, la mejor garantía para que las cosas funcionen.

Proximidad

Parlon también ha basado, por otra parte, su acción política en la proximidad con la ciudadanía. La alcaldesa ha acudido prácticamente a todos los actos que las entidades han organizado a lo largo de los años. También ha atendido personalmente los casos que le han llegado a través de las redes sociales. 

Las políticas sociales y feministas forman parte de su ADN político. En los últimos años ha incorporado las políticas de seguridad y convivencia al discurso político, equiparándolas a la educación, la sanidad o la atención social. Ha llegado a señalar, con convicción, que "sin seguridad no hay democracia", y es esa insistencia en el discurso la que ha llevado a su partido y a buena parte de los alcaldes socialistas del área metropolitana a tenerla como modelo, o a escuchar muy seriamente lo que propone. Asimismo, la alcaldesa de Santa Coloma siempre ha abanderado la lucha feminista en el ámbito municipal, con la puesta en marcha en su municipio de la Ciba (Centro de Información y Recursos para Mujeres de Santa Coloma de Gramenet), un equipamiento que se ha convertido en un referente para trabajar en favor del feminismo desde lo local. 

Alineada con el discurso socialista

Parlon se ha mostrado combativa contra la Generalitat desde una posición serena por enfrascarse en el procés: considera que el gobierno autonómico ha desatendido, con ello, sus competencias.

Superado hace tiempo el período del 155, la alcaldesa está totalmente alineada en el discurso del PSC centrado "en las cosas", en las políticas útiles que sirvan para resolver los problemas de la ciudadanía. Admite, como muchos otros dirigentes socialistas que en su momento dudaron o quisieron entender las razones del soberanismo, que erró. Los deseos de resolver el eterno problema planteado por el nacionalismo, con el cacareado "encaje" de Catalunya en las estructuras del Estado, y dada su formación en Ciencias Políticas, la llevaron a simpatizar con el derecho a decidir. Pero eso se acabó. El PSC ha elevado a Parlon como portavoz porque es el gran referente de muchas de las políticas que se aplican en el área metropolitana.