Los conductores de patinetes eléctricos en L'Hospitalet de Llobregat tienen que irse con ojo. Ya hace tiempo que el Ayuntamiento ahora liderado por David Quirós puso el acento en esta problemática. Incluso transmitió la preocupación a la Dirección General de Tráfico (DGT) con la esperanza de que se regulara de alguna manera el descontrol entre los usuarios de estos vehículos, ya fuera obligando a los propietarios a disponer de un seguro de responsabilidad civil o dotándolos de una matrícula que permitiese multarlos.
Sin embargo, y mientras estos pequeños pero significativos cambios no lleguen, el consistorio ha decidido actuar dentro de sus limitaciones. Porque el 44% de robos con violencia en la vía pública en L'Hospitalet se cometen con un patinete. Una cifra que preocupa al gobierno municipal, que trabaja insistentemente con los cuerpos de seguridad, tal y como han mostrado a Metrópoli.
Barrio de La Torrassa
Mossos d'Esquadra, Guardia Urbana y Policía Nacional han intensificado los controles contra los patinetes. Eso sí, contra los trucados y los que no cumplen la normativa. Lo especifica a este medio Jordi, el cabo de la unidad de motoristas de la Guardia Urbana de L'Hospitalet: "Mucha gente lo usa para desplazarse porque es un medio económico, pero no quiere decir que todos los que lo llevan se dediquen a delinquir", detalla el policía.
El control este martes, 22 de octubre, se ha montado en la plaza Espanyola de La Torrassa. Los tres cuerpos paran e identifican a los usuarios de VMP a plena luz del día, sobre las 12:00 horas: "Damos el alto a todo el mundo", explica el cabo. A esa hora y en esa zona en concreto, mientras decenas de personas reposan en los bancos de la plaza o se toman el café en las terrazas de las numerosas cafeterías, el tráfico de patinetes es alto.
Controles conjuntos
Cada cuerpo mira lo competente: "Mossos se encarga de la identificación del conductor, Policía Nacional gestiona el tema de extranjería y nosotros vigilamos infracciones como que conduzcan sin casco, mirando el móvil o por una zona peatonal", relata el cabo de la Guardia Urbana.
De esta manera se intenta reducir tanto la siniestralidad de tráfico como los robos con violencia. De hecho, entre enero del 2020 y el 30 de septiembre de este 2024, se han puesto un total de 6.653 multas a usuarios. El depósito municipal también está hasta arriba: alberga 400 vehículos requisados por trucaje.
Más de 100 kilómetros
Un patinete trucado puede alcanzar hasta los 100 kilómetros por hora. Lo explica a Metrópoli el inspector de los mossos Carles Quesada: "Nos ha pasado que se nos han venido encima para agredirnos. Por eso montamos estos controles: para, como mínimo, poder reaccionar y parar a quien se intente dar a la fuga".
Se trata de un dispositivo que se alargará durante un mes y contará con dos controles diarios en zonas como el Mercat de Collblanc, el Mercat Torrent Gornal, la plaza dels Ocellets, la rotonda Blas Infante, la plaza Verge del Pilar, la rotonda de los bomberos en la avenida Masnou, la plaza d'Europa y la plaza de la Cultura.
Patinetes robados
A día de hoy, la policía ha logrado retirar de la circulación 17 patinetes y ha interpuesto unas 200 denuncias de tráfico gracias a este dispositivo. "A los usuarios que dan positivo en alcoholemia o drogas se les retira el patinete y se les devuelve cuando dejan de tener la sintomatología. Pero si se les confisca el vehículo por infracción de la normativa, van a parar al depósito municipal", narra el inspector. Esto último es el caso más común.
Diferente es el caso de si el vehículo ha sido previamente sustraído: "Entonces la persona queda detenida y se devuelve al propietario legítimo el patinete".
Infracciones más comunes
Según datos del Ayuntamiento de L'Hospitalet de Llobregat, la infracción mayoritaria a bordo de estos patinetes este 2024 la lidera la de circular por la acera o zonas de peatones. Las sanciones por ello ascienden, de hecho, a 290.
A continuación en este ranking, las multas por no respetar los semáforos se sitúan en 213 y por circular dos o más personas, en 143.