Este es el pueblo “más bonito del mundo” según la Organización Mundial de Turismo: está en Barcelona y lleva dos años en el ‘top’

En el norte de la comarca de Osona, a solo una hora y media de Barcelona, se encuentra Rupit, un pueblo de origen medieval que ha sido reconocido, por segunda vez consecutiva, como el pueblo más bonito del mundo.

Esta es la calle de Barcelona que conserva más comercios centenarios: hasta 200 años de historia

Así se desprende del ranking de la Organización Mundial del Turismo (OMT) que ha premiado con el primer puesto a este pueblo por su encanto natural, su arquitectura tradicional y su cuidado entorno.

Un ejemplo de turismo sostenible

El organismo evalúa criterios como la preservación del patrimonio, el compromiso con el turismo responsable, el cuidado medioambiental y la belleza arquitectónica.

Y Rupit cumple con todos ellos: desde la gestión respetuosa de sus recursos naturales hasta la promoción de una actividad turística equilibrada, pensada para convivir con la vida cotidiana de sus habitantes.

Rupit Ayuntamiento de Rupit

Este reconocimiento internacional no solo pone a Rupit en el mapa de las mejores escapadas rurales desde Barcelona, sino que refuerza su papel como destino ejemplar de turismo sostenible y cultural.

Patrimonio medieval y encanto rural

El casco antiguo de Rupit es un ejemplo perfecto de conservación del patrimonio medieval. Calles empedradas, casas de piedra con balcones floridos y rincones con siglos de historia invitan al paseo sin prisas.

Entre sus joyas arquitectónicas destaca la iglesia de Sant Miquel, de origen románico, y la plaza de la Vila, con sus soportales y ambiente acogedor.

Qué ver en Rupit

Rupit forma parte del municipio Rupit i Pruit y está situado a 845 metros de altitud, rodeado de montañas, bosques y paisajes de gran valor ecológico. 

Cascada de Rupit Ayuntamiento de Rupit

Además de su arquitectura medieval, el municipio esconde una serie de lugares y tradiciones que lo hacen aún más especial para el visitante:

• El puente colgante de Rupit: Construido en 1945, es uno de los elementos más icónicos del pueblo. Cruza la riera de Rupit y ofrece vistas espectaculares del casco antiguo
• Iglesia de Sant Miquel: Este templo, que preside el casco antiguo, fue construido entre los siglos XII y XVII
• Salt de Sallent: A las afueras del pueblo, a menos de una hora a pie, se encuentra esta espectacular cascada de 115 metros de altura, la más alta de Cataluña
• Calle del Fossar y casas nobles: En esta calle se conservan antiguas casas de los siglos XVI y XVII, como la Casa Batlló (no confundir con la de Gaudí) o la Casa Marquès de Palmerola
• Antigua botiga de comestibles: Una pequeña tienda de época, con productos tradicionales y una estética que parece detenida en el tiempo