Estos son los barrios de Barcelona con más "comida basura": sin acceso a producto fresco y saludable

El Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) ha lanzado este jueves, 24 de julio, una advertencia contundente: la mayoría de sus barrios están expuestos a una oferta desproporcionada de alimentos poco saludables, especialmente en zonas con población vulnerable.

Según un estudio presentado en la jornada "Els camins de l’alimentació", el 88,65% de los habitantes metropolitanos viven a menos de cinco minutos a pie de cuatro o más establecimientos de comida poco saludable.

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La investigación, desarrollada por el Institut Metròpoli y el Institut de Recerca Urbana de Barcelona (IDRA), revela que esta sobreoferta tiene una clara dimensión social y económica: los barrios con menor renta son los más afectados.

Zona de panadería de un supermercado Archivo

Ciutat Meridiana, La Mina o La Ribera son ejemplos de lo que el informe denomina "pantanos alimentarios", entornos con predominancia de comida poco saludable y escasa oferta de productos frescos o sostenibles.

Desiertos alimentarios

Aunque los llamados "desiertos alimentarios" —zonas sin acceso a alimentos frescos— son residuales, aún un 14,7% de la población vive en barrios con una oferta insuficiente de comida saludable.

Además, los llamados "oasis alimentarios", donde abunda la oferta ecológica y de calidad, son inaccesibles para muchos vecinos en situación vulnerable. En La Torrassa (L'Hospitalet), por ejemplo, el 95,8% de la población carece de acceso real a este tipo de productos por motivos económicos, revela el estudio. 

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Le siguen los barrios de Fondo (94,6%) o Ciutat Meridiana (84,7%), donde la oferta saludable también resulta inasequible.

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Tiendas de barrio, el epicentro alimentario

El estudio también analiza la composición del mapa comercial alimentario metropolitano. Las tiendas de barrio lideran la oferta con un 41,4% de los establecimientos, muy por delante de supermercados (13%), mercados municipales (15,2%) y autoservicios (16,8%).

Esta configuración influye directamente en los hábitos alimentarios y, en consecuencia, en la salud pública.

FoodCLIC: soluciones locales a un problema global

En el marco del proyecto europeo FoodCLIC, el AMB ha centrado su análisis en barrios como Fondo (Santa Coloma) y Sant Cosme (El Prat de Llobregat), donde la obesidad infantil alcanza tasas preocupantes.

Dos niños que podrían padecer obesidad en una imagen de recurso / ARCHIVO

Para combatir esta situación, el proyecto promueve iniciativas como Cuina de Barri, que ofrece menús saludables a precios asequibles (30 euros al mes), facilitando el acceso a una dieta equilibrada para familias con bajos ingresos.

El AMB también propone medidas estratégicas como la relocalización de la producción alimentaria, el refuerzo de la logística sostenible y la creación de un Consejo Alimentario Metropolitano con participación ciudadana, social y empresarial.

"El objetivo es fortalecer las iniciativas locales para garantizar una alimentación justa y sostenible", han asegurado desde el AMB.